Querido Joseph

Capítulo 10

Los nervios se apoderaronn del chico, le tomo menos de 1 hora llegar a la casa de la chica, permaneció un par de minutos dentro de su auto pensado cuidadosamente las palabras que ocuparía con el señor Evans

- Bien, Joe tu puedes, ve por la chica- menciono para animarse a si mismo

Salio del auto con la manos temblorosas, camino hacia la puerta y toco el timbre un par de veces

El sonido de la puerta abrirse, lo puso aún más nervioso

- Joseph, que sorpresa muchacho- menciono Chris- adelante, estas en tu casa- con tono amable, mientras se dirigía al comedor y tomaba asiento nuevamente- ¿Quieres acompañarme a cenar? ____ aún no llega así que me toco cenar solo-

- No, no realmente necesito hablar con usted- con un tono nervioso

- ¿Que paso? ¿Todo bien con ____?

- Si todo esta perfecto -

- Entonces, dime, que pasa-

- Señor, quería hablarle sobre mis sentimientos hacía ____-

Chris dejo a un lado sus cubiertos y su rostro tomo un semblante serio, lo que hizo que Joseph dudara por un momento lo que quería decir

- ¿Sentimientos por mi hija?- pregunto

- Los días que he salido con ____, y en los que he trabajado con ella me han hecho sentir muy bien, en este tiempo me he dado cuenta de que ella se ha vuelto una persona importante en mi vida, más de lo que quiero admitir, y es por ello que me he tomado el atrevimiento de venir a hablar con usted sobre ella, porque realmente estoy enamorado de su hija- mientras jugaba nervioso con sus manos- y quería saber si me da el privilegio de ser el novio de ____

Chris lo miro a los ojos y le regalo una dulce sonrisa,

- Joseph- menciono mientras se levantaba de su asiento - ¿veniste hasta aquí, para decirme todo lo que sientes por mi hija?- pregunto

- Lo sentí necesario -

- Realmente la quieres ¿no es así?

- La amo- sonrió

- ___ ha luchado demasiado, y no solo para llegar a donde esta, si que también ha tenido que luchar con la ausencia de su madre desde que era una niña, ha luchado contra la gente que solo la busca para hacerle daño, y sin embargo no se rindió, y tal vez te estés preguntando el porque te cuento esto, pero la respuesta es simple, porque estos últimos días la he visto más feliz y libre, y se que es por alguien - tomando asiento a lado de Joseph - y ese alguien eres tu, y te lo agradezco

- Siento que yo le tengo que agradecer a ella, me contagiado de si bondad, su alegría, de verdad soy feliz con solo verla-

- Y se que ella se siente igual contigo, por esa misma razón te entrego toda mi confianza, cuida y protege a mi hija en todo momento - dándole una pequeña palmada en la espalda, mientras se ponía de pie

- Tiene mi palabra, y también quería pedirle un pequeño favor- poniéndose de pie

- Dime

- Quisiera preparar una sorpresa para ____ en el jardín -

- Adelante muchacho, si necesitas algo de ayuda, me llamas- menciono sonriente

- Se lo agradezco -

Joseph camino hacia el jardín y comenzó acomodando las pequeñas sillas de descanso que se encontraban al centro del lugar, en su mente comenzó a buscar las palabras adecuadas para hacer saber su propuesta, pero también existía el miedo de recibir una respuesta negativa