MIRABA con asco a los ladrones mientras estaba cruzada de brazos como si no me estuviera apuntando un arma y como si no tuviera ganas de tirarme encima de ellos y darles de hostias.
Mi miedo de verdad fue cuando Betty llegó y asustada siguió las indicaciones del estúpido que nos apuntaba con un arma mientras los otros dos pringados trataban de buscar algo en la casa que robar.
Cuando fueron a por la reliquia familiar intenté levantarme pero él estuvo a unos centímetros de haberme golpeado hasta que una pálida mano sujetó su brazo
No la toques, capullo -dijo Emmett. Abracé más hacia mi pecho a Betty cuando Jasper y él....mataron a los chicos, los dejaron secos, literalmente. Esperaba que fuera un sueño, o más bien una pesadilla, y apretaba más a Betty para que no tuviera que sufrir viendo eso también- Aidana, Betty, se que estáis asustadas pero tenemos que irnos
¿Cómo...? -traté de hablar pero Jasper ayudaba a Betty a levantarse y Emmett me ayudaba a mi. Me separé con algo de temor-
¿Podemos discutir esto luego? -se quejó Emmett estirando su mano hacia mi- vamos
¿A dónde? -me confíe de su mano para luego seguirlos-
A casa -respondió un estático Jasper-NO fue una conversación muy larga.
Más bien, gracias a mis cosas de friki deduje que eran ellos.
Betty y yo nos miramos tras la confirmación del rubio y estallamos en carcajadas haciendo que ambos nos miren extrañados pero que Emmett se una a la risa aún sin saber el motivo
¿Vampiros? -pregunté de nuevo para volver a reírme como un motor estropeado- ¿Os convertís en murciélagos?
¿Les estamos compartiendo un secreto que podría hacer que nos matasen y ustedes se ríen? -preguntó sin entender Jasper mientras nos abría la puerta de su casa-
Es mejor eso que chillar o contárselo a alguien -se encogió de hombros Betty mientras pasaba mi brazo por estos-
¿Por qué estáis así de tranquilas? Podríamos mataros -se metió Edward en la conversación. El de pelo pincho-
Ay, sí, por favor -pedí estirando mi brazo dramáticamente suponiendo que mordiera este-
Me alegro de que lo sepáis pero tenéis que guardar el secreto,¿sí? -apareció una hermosa mujer-
¡Estoy segura de que lo harán! ¡Vengan! Tengo camas de sobra -chilló la de pelo corto, Alice, tirando de nuestras manos para ir a su habitación-ME veía ridícula tras verme en el espejo con el pijama cursi que Alice nos había prestado para dormir
Hice una mueca de asco mientras bajaba las escaleras.
Rodé los ojos tras ver a Emmett ahogarse con su propia saliva tras reírse
Como digas alguna palabra sobre esto, no me importará que seas un vampiro, te partiré el culo -le señalé-
Y yo que me iba a ofrecer a darte algo más bonito, pero creo que así estás bien -asintió Emmett. Tendría que jugar un poco mejor-
Por favor. Estoy ridícula -le rogué-
Sí la chica mala resulta no ser tan mala -se burló a lo que suspiré cruzandome de brazos- venga, vamos, seguro que encuentro algo para ti
Gracias -murmuré siguiéndole. Creo que a mis ojos le salieron estrellitas como en las películas tras ver su maravillosa habitación. Reí cuando mi visión fue interrumpida por la tela de una gran camisa en mi cara-
Creo que eso servirá -me dijo a lo que estiré mi mano. Él rodó los ojos y me dio unos pantalones- aburrida
Pervertido -le saqué la lengua para empezar a caminar hacia la puerta-
¿Y mi beso de buenas noches? -me preguntó coqueto-
Que venga tu madre a dártelo -me burlé para empezar a caminar viendo su sonrisa mientras me miraba- buenas noches, Emmett Cullen
Buenas noches, Aidana Smith -me dijo de vuelta-
¿Cómo sabes mi apellido? -le pregunté girandome-
Tengo mis métodos - se encogió de hombros para luego cerrar la puerta. Y luego la misteriosa soy yo, eh-
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AIDANA {EMMETT CULLEN}
RandomAidana no tuvo que usar ninguna clase de poción o brujería para que "el grandioso Emmett Cullen" se fijara en ella. ¿Quién no lo haría?