Laponia

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En el aeropuerto

Izuna llevaba una maleta gigante, enserio, era una maleta muy grande que finalmente consiguió facturar, según él no sabía que ropa podía combinar, iban para estar todo un mes y necesitaba todo tipo de ropa.

Para Izuna no era una sorpresa lo del viaje como para Obito, ya había hablado con su hermano sobre que todos tuviesen las vacaciones en diciembre para viajar, él era cocinero en un restaurante, sin duda un trabajo muy estresante y deseaba olvidar por todo el mes su trabajo y su lamentable vida amorosa.

Todos estaban en la puerta de embarque, tenían sus pasaportes, tarjetas sanitarias europeas, los billetes de avión y equipaje de mano, todo estaba listo, solo faltaba que llegase la hora para poder subir al avión.

Hashirama y Madara estaban sentados, Hashirama leía un libro sobre medicina y Madara les estaba escribiendo un mensaje a sus alumnos por el grupo de WhatsApp.

Niños, no os engordeis estas navidades o os pondré a base de abdominales en enero, lo digo en serio, espero que papá Noel os traía muchos regalos, cuidaos mucho y abríguense bien. ✓

Obito estaba sentado al lado de sus tíos, se había quedado dormido con una cara muy graciosa e Izuna le estaba haciendo una foto, más tarde la enviaría por el grupo familiar deseando felices fiestas.

Izuna: ¡Ya están abriendo las puertas!

Madara: ¡Niño despierta! - chilló a Obito mientras le tapaba la nariz para que se despertara.

Obito: ¡Ahh! - chilló sobresaltado y con la sensación de asfixia - ¡¿Podrías despertar a la gente de forma más cariñosa?!

Madara: ¡Venga que ya han abierto las puertas!

Subieron al avión, Madara sentado en la ventanilla con Hashirama al lado, y justo detrás Obito junto con Izuna, fueron solo 4 horas de avión hasta Helsinki. Obito se volvió o dormir, Izuna se puso a ver una película romántica (eran sus favoritas), Hashirama se mareó y tubo que cerrar los ojos y no moverse mucho en todo el viaje o juraba que le vomitaba a su marido y Madara estuvo mirando por la ventanilla y comenzando a hacer las fotos de viaje.

Madara era el típico que hacía fotos hasta a los enchufes del hotel y luego lo subía todo a Facebook "mi viaje a Laponia, 300 imágenes hasta del aeropuerto, los enchufes, el baño, etc"

El avión aterrizó, se pusieron las ropas de abrigo y más salir sintieron el frío polar chocar con sus pieles, Hashirama casi se desmaya, después del mareo un frío terrible, tenía ganas de llegar al hotel y tumbarse en la cama.

Recogieron las maletas, con suerte no se perdió ninguna y luego salieron en busca del tren.

Más salir del aeropuerto cogieron un taxi para ir a la estación de tren, por suerte Obito hablaba inglés, porque ni Madara, ni Hashirama, ni Izuna sabían Inglés o Finés.

Obito se entendió muy bien con los Finlandeses en inglés, supo que tren les llevaba a Laponia, subieron pero tenían mucho trayecto aún, para ser exactos 10 horas de tren, Rovaniemi era la penúltima parada, la última, aún más al norte, el Ivalo, Obito pensó que el Ivalo debía ser el fin del mundo o algo así, que solo vivirían allí osos polares, zorros, lobos, etc.

Todos se durmieron en el tren pero hicieron turnos para no pasarse de parada, hasta que finalmente llegaron a su destino.

En Laponia

Eran las 13:00 del medio día y por fin acababan de llegar a su destino, si el frío de Helsinki casi mata a Hashirama el de Laponia no se quedó atrás, estaban a -11 grados, no subiría de los 0 grados hasta primavera, así que debían de acostumbrarse.

Ártico de Plata (ObiKaka, TobiIzu y HashiMada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora