Prologo

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Tal vez en un mundo paralelo, no estaríamos así, estaría viendo películas mientras me atragantó de papas fritas y tomando coca cola hasta que un doctor pueda considerarme diabética. Pero no, la vida no podía ser tan fácil.

Si tan solo no lo hubiera conocido, si no le hubiera dado mi número... Si no lo hubiera besado esa noche.

Y así es como teníamos huyendo de la policía, así es como terminamos con una adrenalina que jamás llegué a sentir en toda mi vida ¿Pero supongo que la vida es así no?

Y este es el momento en el que me preguntó ¿Valió la pena?

— Sujetate — dice mientras me aferró a sus espalda, en una moto que creo ha llegado a su máxima velocidad por siento cada bache que cruzamos a medida que las sirenas de la policía se me hacen más lejanas.

— Iremos presos— digo más para mí misma que para él.

Mi hermano va matarme.

Es lo último que pienso antes de meternos en ese túnel.

"Nadie es insignificante, solo hay personas que no se creen capaces de hacer cosas maravillosas"

Rosa eternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora