-cielo...
Dijo mi padre, entrando a mi habitación con un traje negro, ví su mirada perdida triste, llena de sentimientos de dolor, furia, frustración.
Lo mire callada, ni una sola palabra salía de mi boca, no quería que mi padre se ponga peor, no sabía de dónde sacaba fuerzas para pararme después de perder a mi hermano y a mi madre en un atraco, Julián tenía dos marcas de balas una en el pecho y otra justo en el corazón y mi madre uno directamente en la cabeza esos bastardos pagarían por esto.
-Papá, buenos días
dije sin mirarlo a los ojos con la mirada en el piso
-buenos días July, es hora de irnos, las camionetas están afuera date prisa.
Sin ninguna palabra más salió de mi habitación, termine de ponerme el tocado en la cabeza y me dirigí a la habitación de mi hermano.
Vacía, nadie iluminaba ese lugar una cama vacía y fría, todo ordenado, todo en su lugar.
Y recordé las muchas cosas que pasamos...........
-Juliannn dame mi celular
Dije regañando a mi hermano
-que ocultas pequeña mocosa acaso tienes novio y no me quieres decir
Alzo el teléfono para que no pueda alcanzarlo
-Julián es mi celular que te interesa que hay ahí
-mucho hermanita mucho que tal si sales con un horrible universitario por qué tienes unos gustos que mmj
-eres un grosero MAMÁAAAAA JULIAN NO ME QUIERE DAR MI CEL.....
me tapo la boca para que no llamara más a mi madre
- eres una chismo..
Antes que pueda terminar su frase mi madre interrumpió
- JULIANN NO TOMES COSAS QUE NO SON TUYAS DALE SU CELULAR A TU HERMANA
dijo entrando nuestra madre a su cuarto, y vio como literalmente nos estábamos jalando de los pelos
-MAMÁ JULIET NO ME SUELTA
mi madre se ríe de aquella escena y corre hacia nosotros para hacernos cosquillas.
..........
Limpie mis lágrimas recordando eso y me dirigí a la pequeña mesita de noche que tenía mi hermano, ahi estaba un retrato de mi hermano y mía y otro a un lado de toda mi familia el siempre fue un muchacho muy sonriente. A un lado estaba un collar con una pequeña luna lo tome y me lo puse, ahora tenía dos collares en el cuello uno de un sol la mía y la otra de el así sentiría que lo tendría más cerca.
Llegamos al cementerio donde ya se encontraba un padre y los dos ataúdes.
Bajamos del carro mi padre y yo caminamos hacia el lugar donde se encontraban, tomados de la mano nos dirigimos ahí, solo nos encontrábamos el y yo y el padre y los guardias solo veían de lejos
Vi los dos ataúdes no podía creer lo que estaba pasando, ví el ataúd de mi hermano y de mi madre maldiciendo a todos eso desgraciados. Antes en mi vida me hubiera gustado tocar un arma, ahora solo quería hacerlo, buscar uno por uno a esos hijos de puta y matarlos y luego mandar partes de sus cuerpos a sus familiares para que paguen el dolor de mi madre de mi hermano.
Y ya estaba hecho ya estaban bajo tierra me quedé unos segundos observando las lápidas.
Y JURE
-Juro que buscaré Hasta debajo de las piedras a quienes les hicieron esto y pagarán por esto eso está por seguro.
Al finalizar aquella frase un trueno fuerte sonó como la iniciación de mi venganza.