𝐃𝐑𝐄𝐀𝐌 𝐎𝐅 𝐌𝐄!【mha】

★7. Izuku Midoriya

﹝🥣﹞

7.

—¿Sabías que practicar felaciones disminuye el riesgo de sufrir preeclampsia? Lo dijo un estudio del 2000, publicado en el...—Palabras en inglés, cosa que no intentaría pronunciar ni aunque le pagaran. No cometería semejante bochorno delante de su esposa.—...En algún artículo con nombre gringo ¿lo sabías?

Recién amanecía y ya comenzaba con sus pequeños datos innecesario, que terminarían en el olvido.

—¿En serio? —Responde no muy sorprendida la fémina, ladeando la cabeza relajada y sonriente, tomando asiento para desayunar junto a su pareja.

—Sip. —Mete una cuchara de leche y cereal a su boca, mirando los movimientos de la mujer que acomodaba la silla a un lado de su marido.

—No, digo, ¿en serio se te acaba de venir eso a la mente mientras te comes tu cereal?

No sabe cómo no se lo vio venir, incluso sabiendo el cómo es su preciada esposa, conociendola ya aproximadamente siete años. Agachó la mirada, totalmente colorado por el bochorno impregnado en sus pecosas mejillas, resaltandolas aún más como si fuera poco.

—...jaja

Y ella ama verle esa reacción, así que solo parace embobarse de esa carita abochornada, pellizcando una de sus mejillas sonrosadas.

—Y lo peor...o mejor, es que estoy embarazada ¿lo sabías?... —Con exageración en su rostro lo asienta, en un falso intento de imitar a su pareja cuando comenta esos datos esporádicos innecesarios tan acostumbrados en la relación.

¿Disculpa?

¿Acaso al fin...

—¿Embarazada dices? ¿cómo? ¿desde cuándo? —Dejo de mandar cucharadas a su boca, inyectado por la curiosidad y nervios que ese único comentario causo en su interior.

—Ay cariño...cuando el pene penetra a la vagina y-

—¡AMOR! Sí, ya lo sé jaja. Me refería a que ¿ESTÁS EMBARAZADA?... —La lengua sin pelos de su mujer lo hacen reír, pero ahora los nervios se lo comían vivo, así que concentrado debía estar, a pesar que muy simplemente y se tratara de una mala broma.

—Sí...jaja, está vez si es verdad.

Los ojitos de Izuku brillan como nunca, mientras lleva sus manos a su cara, tapando por inercia su nariz y boca, muy sorprendido y alegre. Esa noticia. Llevaban meses intentando, una y otra vez, hasta que al fin, después de malas bromas de mal gusto y mucho follaje, habían quedado en cinta. (Solo la señorita, evidentemente)

—Cariño...

—Mi amor...jaja —La joven treintañera (más ocho años) al igual que el chico podía percibir la ilusión en sus ojos. Ambos estaban muy contentos, al fin serían padres, como tanto habían intentado ser.

—En serio no me lo creo...esto es increíble...—El chico seguía sin moverse de su posición, con casi lágrimas en sus ojos.

—Sí, lo sé jaja

La fémina se levanta del asiento para abrazar a su pareja y llenarle de besos esa carita pecosa, manchada de lágrimas saladas. Lágrimas de felicidad. Y al igual, el joven agarró de la cara a su chica para besarla, una y otra vez.

Ahora ya en su asiento, la señorita siguió sin quitarse de la vista a su marido.

—Bueno, ¿hacemos lo que al principio decías? —Mueve su lengua en el interior de su cavidad bucal, tocando continuamente el interior de las mejillas, notandose por fuera, mientras su mano hecha puño seguía el movimiento de la lengua dentro, al compás. Como si se estuviera comiendo una verga, dios. —Lo de la preeclampsia, cari-

—Ay~ dioss...

Bueno, demasiado gráfico para el pobre Midoriya, que la erección no se hizo tardar al saber de primera mano de lo que habla. Bochorno y excitación, no importa, igual, tendrán al fin a su bebé.