Becoming Supergirl (SuperCorp)

Capítulo 17 : Es una misión loca

Kara trató de recuperar el aliento y controlarse cuando Lena se acostó frente a ella. Esta vez no quería distraerse, quería llegar a su centro, hacer que perdiera el control y se desmoronara bajo su lengua y sus dedos. 
Se movió rápidamente para cubrir el cuerpo de Lena con el suyo. No quería que Lena esperara un momento. 
Inmediatamente comenzó a besarla profundamente mientras su piel desnuda y sus pezones se movían juntos.

“Lena, te deseo tanto. Por favor, déjame probarte".

“Sí, sí, quiero sentir tu boca sobre mí. Quiero sentirte dentro de mí, por favor.” rogó Lena.

En eso, Kara comenzó a deslizar su lengua por su cuello, moviéndose lentamente con besos y lametones, queriendo probar cada parte de ella. Lamió alrededor de la curva de sus senos y chupó sus pezones con fuerza en su boca. Se inclinó para desabrochar los pantalones de Lena y los deslizó hacia abajo con reverencia, observando con asombro cómo se revelaba más del cuerpo de Lena. Decidió que no debería quitarse los pantalones del todo, en caso de que alguien viniera por el sendero, podría vestirse más rápido. Era poco probable, y los escucharía desde la distancia, pero pensó que tal vez Lena se sentiría menos expuesta. Con los pantalones alrededor de los tobillos, Lena era una vista gloriosa. Tenía las rodillas dobladas, con las piernas separadas. Kara había visto sus piernas cuando usó una falda en su cita, pero tenerla casi desnuda, solo con sus bragas rojas de seda en el suelo frente a ella era una sensación increíble y poderosa. No podía esperar a tener a Lena retorciéndose y gimiendo debajo de ella. 
Deslizó las manos desde las rodillas hasta los muslos y luego se inclinó hacia abajo para continuar besando sus pechos. Se movió constantemente por su estómago, besando un rastro hacia sus bragas. Mientras su lengua bordeaba la parte superior de las bragas de Lena, movió sus manos alrededor de las caderas de Lena y deslizó sus dedos en la parte superior de sus bragas, esperando el permiso de Lena. Lena levantó las caderas para que Kara pudiera deslizarlas hacia abajo y finalmente alcanzarla. Kara se sintió abrumada al ver y oler a Lena. La vista de su coño, mojado y abierto para ella, era fascinante. 

"Lena, ¿estás segura de esto?"

“¿Estoy segura de que quiero que me toques y me pruebes? ¿Estoy segura de que te quiero dentro de mí?" Lena preguntó.

"Sí, supongo, todo eso".

“Kara, he estado deseando esto desde que te vi. Ahora que te conozco eso es doblemente cierto. Estoy lista para cualquier cosa que seas”. Con su pecho subiendo y bajando, Lena claramente no estaba tan indiferente como quería sonar, pero Kara podía decir que estaba tratando de aliviar la presión tanto como podía y luchando contra los impulsos de su cuerpo.

Con eso, Kara separó más las piernas de Lena y se zambulló con la lengua para saborearla. Deslizó la lengua hacia abajo hasta que pudo sentir el clítoris de Lena debajo de la lengua y comenzó a lamerlo y rodearlo suavemente. Kara estaba un poco abrumada al darse cuenta de que tenía la lengua en el clítoris de Lena. Los sonidos que hacía Lena la impulsaron a seguir adelante. Quería hacer todo lo que pudiera para seguir escuchando sus jadeos y súplicas mientras Lena comenzaba a mover más su cuerpo frenéticamente contra la lengua de Kara.

"¡Oh, dios, sí!" Lena gritó mientras Kara continuaba moviendo su lengua alrededor del clítoris de Lena, posiblemente borrando la línea entre la velocidad humana y la súper. Lena se agachó y puso su mano en la parte posterior de la cabeza de Kara y comenzó a mover sus caderas hacia adelante y hacia atrás contra su boca. Kara podía sentir el clítoris de Lena hincharse contra su lengua y podía oír lo desesperada que estaba. Había dejado de pensar en su polla y en la imperiosa necesidad que sentía de aliviar esa presión, y pudo concentrarse por completo en hacer que Lena se corriera. Era todo lo que le importaba. Su lengua se movió en respuesta a los movimientos y sonidos de Lena. Por instinto, deslizó los dedos para encontrar la apertura de Lena. Movió los dedos hasta que lo encontró y jugueteó suavemente alrededor de su entrada, un poco nerviosa por empujar demasiado fuerte dentro de ella. Lena comenzó a gemir en voz alta y le rogó a Kara que se moviera dentro de ella. Kara podía sentir lo mojada que estaba Lena y escuchar cuánto la deseaba. Finalmente, deslizó sus dedos dentro lentamente mientras Lena jadeaba y se retorcía de placer.