Capítulo 37

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Louis gruñó con todas sus fuerzas y tomó lo primero que tuvo a su alcance que fue un cuadro y lo tiró al suelo.

"¡Jodida mierda!" gruñó con rabia.

"Boo..." intentó acercarse Lottie.

"¡Déjame solo!" dijo entre dientes.

"Estaremos bien" aseguró ella desanimada.

"¿Llegó a avisarle a alguien?" preguntó Louis ignorandola.

"Si..."

"¿A quien?"

"Los del norte" el omega tomó aire con fuerza y miró a su alrededor.

La cama de Mark estaba vacía y desordenada, a un lado de él se encontraba un pequeño mueble con retratos y sus pertenencias.

"¿Y?" respiraba agitado.

"Están en camino" Louis tomó con una mano el mueble por detrás y lo empujó con fuerza dejandolo caer al piso en un fuerte estruendo.

"¿Cuando?" miró a Lottie quien tenía ambas manos en sus oídos por el gran ruido de cosas rompiéndose.

"Al rededor de la media noche entraran en el bosque" se alejó un poco. Por qué apestar de que Louis era un omega su olor era muy fuerte cuando se enojaba.

"¿Quienes lo saben?" rompió un retrato dándole una fuerte pisada al cristal.

"Todos"

"¿Y que piensan de eso?"

"Están emocionados. Ya quieren conocer al nuevo líder" murmuró tragando saliva.

"¡Nuevo líder!" rió con amargura "¡emocionados por el nuevo líder!" gruñó "¡Una mierda!, ¡él no será el nuevo líder de nada!"

"Lou...te vas a lastimar" intento acercarse cuando vió un cristal clavado en su pierna.

Ni siquiera se había dado cuenta de aquello pero no le importaba, solo se inclinó y se lo quitó, lo tiró a un lado.

"Rata asquerosa, no podía evitar que la mierda llegará a su corazón" rió "Espero este sufriendo dónde sea que esté"

"Lo siento, Lou" susurró Lottie.

"No lo sientas, no hiciste nada." suspiró "Ve a tu habitación o simplemente no salgas de casa, no quiero que ellos estén cerca de ti"

"Está bien" asintió.

Louis se acercó y la atrajo a su pecho para abrazarla con fuerza.

"Estarán bien" dijo con seguridad.

"Tu también lo estarás, Boo"

"Estarán bien" repitió.

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Louis salió de su casa y miró el cielo. Oscuro, con truenos resonando cada cierto tiempo y aún así el aire era cálido. Todo en completo silencio.

Caminó entre los árboles, entre la oscuridad y sombras que lo acompañaban.

Su mente no funcionaba, solo tarareaba una melodía que había copiado de Harry. No sabía de que era pero más de una vez el alfa tarareaba aquella melodía y se le terminó por pegar al omega.

Llegó a su destino y pudo ver a toda la manda, eran bastantes, al rededor de cuarenta lobos. La gran mayoría eran alfas, las omegas eran la minoría y había algunos cachorros dando vueltas y jugando con sus madres.

La gran mayoría de ellos eran hermanos entre todos ya que allí "compartían" omegas. A Louis le parecía asqueroso aquello, más aún cuando no se les era preguntado a ellas y solo debían obedecer y procrear.

Mi agresivo omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora