Capitulo 1

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Wang Yibo y Xiao Zhan son dos hermosos jóvenes guapos y grandes amigos desde pequeños.

Xiao zhan alto, de complexión delgada y varonil, cabello azabache, ojos color marrón, labios rojos como la cereza adornado de un ardiente lunar bajo su labio inferior.

A sus 5 añitos sus padres se mudaron a Beijing, donde conoció a su mejor amigo, su confidente, su hermano, su todo.

Desde pequeño era muy amable con sus más allegados, amoroso, con desconocidos era muy serio y frío, siempre soñó con formar una familia con una linda chica, que fuera amorosa como su madre.

En el momento en que llegaron a su caluroso y tierno hogar, dónde tendría muchas aventuras y ganar algunos amigos, supo que hacía unos dos días sus vecinos, también se acaban de mudar.

Desde que ambas familias se saludaron tuvieron química entre ellos al igual que sus hijos que desde ese momento se volvieron grandes amigos y vivieron muchas aventuras conforme el tiempo.

Cuando el pequeño Zhan conoció al lindo leoncitos de cachetitos llenitos pudo sentir como su corazón golpeó rápido que por un momento tuvo miedo y sus lágrimas se derramaron causando preocupación a sus padres quienes vieron el cambio en el rostro del pequeño conejito.

Se avergonzó cuando el lindo niño castaño, ojos color miel, labios color durazno y regordete, con piel blanca como la nieve, pero el hermoso cachorrito parecía una niña por su belleza tan etérea que lo primero que vino a la mente del conejito ella será mi esposa.

Al principio pensó que su corazón dio ese brinco cuando supo que no era una niña sino un niño, sintió tristeza porque supo que no podría amarlo de otra manera.

El siempre vio en la televisión y sus familiares que toda las familias se conformaban de mamá y papá, una mujer y un hombre, tenía un tío que cuidaba de el unos pocos meses en los que sus padres trabajaban.

El le enseño que está vida no podía haber otra clase de parejas que no fueran un hombre y una mujer, porque estaba prohibido, no era normal, no era parte de la naturaleza humana, según los estúpidos pensamientos de su ignorante tío homofóbico sin que el pequeño supiera la verdad.

Ese fue uno de los principales motivos por los que Xiao Fengmian con Jin Tong se mudaron de ciudad, cuando se enteraron debido a un comentario inocente de su bebé, sobre lo que su tío le enseñaba.

Sus padres hablaron con el y le hicieron entender que no había problema si el un día gustaba de un niño que para el amor no existe sexo, color, ni edad.

Pero que todo era a su debido tiempo, que aún estaba pequeño para pensar en matrimonio, debía estudiar y así poder darle un buen futuro con quién formaría una hermosa familia.

Pero a pesar que sus padres hablaron con el, su cabezita aún resonaban esas palabras de su tío que repitió varias veces durantes meses, no era fácil olvidar eso de la noche a la mañana, era un duro trabajo que hacer.

A sus padres, les gustó la química que hubo entre ellos, así que tanto Wang Ziteng cómo Wen Ruohan, tomaron la decisión de poner a estudiar a su pequeño cachorro de león en el mismo jardín que los Xiao.

Ya que su adorado leoncito era un poquito tímido y ellos no querían que el creciera sin tener amiguitos y ellos se sentirían más tranquilos al saber que había alguien conocido cerca de su bebé.

Ambos niños tenían la misma edad, 5 añitos cumplidos y a pesar de su corta edad tenían una belleza sorprendente que todos los niños y niñas quedaban con la boca abierta al verlos.

Xiao Zhan se volvió muy posesivo con el pequeño Wang Yibo, más cuando unas compañeritas decían que el niño castaño les gustaba por la dulzura con la que hablaba.

Así paso el tiempo y ellos ya tenían 15 años, todas sus fiestas las celebraban juntos ya que cumplían añitos el mismo mes con la diferencia de dos días la fecha de nacimiento, pero ellos siempre decían que querían juntas sus fiestas.

Ese fue el patrón de siempre, una sola fiesta para ambos, misma temática, tenían similares gustos, aunque Xiao zhan siempre quería complacer los gusto de su leoncito.

Durante sus estudios de primaria ellos siguieron solos no tenían más amigos, entre ellos dos se sabían entender muy bien.

Xiao Zhan cuidaba bien del tímido e inocente cachorrito de león, mientras Wang Yibo aprendió a cocinar para complacer a su conejito en la comida, ya que este siempre se quejaba que dónde estudiaban no hacían buena comida que le gustaba más la que el llevaba.

Así que el castaño tomo la decisión de aprender más recetas y cocinar para ambos.

En la secundaria hubo un pequeño cambio, el duo ahora era un grupo de cuatro, a ellos se acercaron dos lindas chicas, que supieron ganarse un lugar en el corazón y el duo de ambos.

Yang Zi y Zhao Liying dos hermosas y cariñosas chicas, que eran grandes amigas desde pequeñas al igual que el duo de los chicos.

Desde que ellas vieron que entraron los dos hermosos chicos quisieron acercarse a ellos, ambas con motivo diferentes.

Zhao Liying sentía un aura en ellos que la hacía sentir segura, quería una bella amistad con ellos dos, a pesar de la belleza y amabilidad de ambos, nos despertaron ningún interés amoroso en su corazón.

Todo lo contrario de Yang Zi, que desde el momento en que vio a Xiao Zhan quedó con el corazón prendado a él, declarando que este sería el amor de su vida y su esposo con quién quería formar una bella familia.

Pero al parecer no sería tan descabellado cómo ella pensó sería, había hasta planeado que hacer para que ese hermoso chico se fijará en ella.

Cuando se acercaron y se saludaron, Yibo y Liying pudieron notar como de los ojitos de Xiao Zhan y Yang Zi salían corazoncitos, ambos se perdieron en sus miradas.

Zhan volvió a sentir en su corazón el bum bum que dio su corazón cuando conoció al tímido y pequeño leoncito que ahora era un hermoso jovencito que estaba a su lado siempre.

Se sentía tan bien al lado de su mejor amigo que no creyó tener sentimientos por el, se acostumbro a su compañía, a sus comidas y salidas juntos.

Ellos hacían todo lo que el otro hacía, en ocasiones hasta dormían juntos, para los señores Xiao oh Wang ya no era sorpresa verlos juntos y cuando dormían juntos siempre en la mañana que hiban hablarles para que no les agarrara la tarde.

Siempre veían al castaño durmiendo sobre el pecho del azabache y este último aferrado a su cintura muy posesivo.

Se habían echo a la idea que se quedarían juntos, debido a la conexión y química que tenían.

Pero todo cambio ese primer día de secundaria, cuando el pequeño cachorro de león llegó con sus ojitos llorosos y abrazo fuerte a sus papitos y lloro por casi toda la tarde hasta quedarse dormido.

Ziteng y Ruohan, no entendían que había sucedido a su adorado hijo, lo más extraño fue que ese día no llego Xiao Zhan con el, ni en el transcurso de la tarde lo visito para hacer sus tareas juntos.

Grande fue la sorpresa al saber que al otro día cuando su leoncito paso por la casa de Zhan a llamarlo para que se fueran juntos a estudiar, su hijo regreso a decirle a Ziteng si lo llevaba al colegio.

Debido ah qué Zhan se había ido más temprano porque tenía un trabajo que hacer había dicho la señora Xiao.

El castaño sabía muy bien cuál era el trabajo de su amigo, los señores Wang no había comprado un medio de transporte a su hijo debiado ah qué el azabache les había dicho que el siempre llevaría a su hijito en su motocicleta.

Así ara poder cuidarlo siempre, esa fue la primer promesa que el azabache había roto, ese día, Ziteng con mucho gusto fue a dejar a su hijo pero tenía curiosidad del comportamiento del otro.

Estaba acostumbrado a verlos juntos que todo esto se le hacía raro.

Así paso el tiempo, días, meses y años, Xiao Zhan nunca más volvió hacer el mismo con Wang Yibo.

El castaño tenía su corazón roto, porque el amaba a Zhan, porque el se enamoro de ese conejito desde el primer momento en que lo vio cuando aún eran niños.

Todo ese tiempo todo lo que el hacia lo hacía de corazón, lo hacía por amor, lo hacía porque le nacía dar todo por su Zhan.

Wang Yibo empezó a perder el brillo de su mirada, su sonrisa empezó a borrarse, algo que preocupo a los señores Wang fue cuando un día avisaron que su hijo se había desmayo y estaba en la enfermería.

Ahí supieron que su hijo no comía en el colegio solo en su casa y comía poco.

Así como también confirmaron que algo se había roto entre Zhan y su hijo, porque el azabache ni siquiera estaba con el, en ese momento difícil.

Traición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora