Pokefilia Extrema ♂️x♂️

Un Entrenamiento Especial

Cinderace x Entrenador
Imágen hecha por: Frumples

En un día muy soleado, se estaba llevando a cabo un entrenamiento a los Pokémon para un partido de fútbol, entre ellos estaba tu Pokémon, Cinderace. Él era tu Pokémon desde tu juventud, y con el pasar del tiempo ha ido evolucionando hasta llegar a su fase final. Sin embargo, con el tiempo que pasaste con Cinderace no te habías dado cuenta del aprecio que tú sientes por él. Esto hace que desarrollara un fuerte sentimiento hacia él, no solo por su consentimiento contigo sino por su apariencia y belleza. Te habías enamorado de él sin importar que es un macho.

Ya una vez acabado el entrenamiento, ya va siendo tarde y todos se van a sus casas con sus Pokémon, menos tú y Cinderace, que decidieron quedarse aquí un rato antes de volver a casa.

En los vestuarios... Te encontrabas esperando a Cinderace a que termine de bañarse, pero no podías esperar más, por lo que vienes a buscarlo. Entras a los baños y encuentras a Cinderace tomando una ducha, pero lo que más te impresionó fue verlo desnudo, con su pene alzado y su enorme gordo trasero. Esto hizo que por puro instinto se para una erección en los pantalones, lo cual te pareció raro pero a la vez excitante.

Tuviste que guardar silencio mientras veías a Cinderace bañándose, y en el momento que se agachó a recoger el jabón, le viste su ano. Esto hace que se te pare aún más el pene, y aunque lo negaras no dejabas de pensar en ello. Sabes muy bien que una vez lo mires nunca se te va olvidar, por lo que no tienes otra opción más que aceptar lo que tú sientes. Te quitas la ropa, entras al baño sin que se de cuenta Cinderace.

Sorpresivamente agarras a Cinderace por las nalgas y éste se asusta al ver que estás desnudo con él.

Cinderace: ¿Ma... Maestro? ¿Qué estás haciendo?

Le sigues manoseando las nalgas a Cinderace y este se avergüenza con lo que haces.

Tú: Cielos Cinderace. ¿Desde cuando tenías ese trasero tan gordo y jugoso? Y encima tienes un lindo pene.

Cinderace: ¿Eh? ¿Pero qué estás diciendo Maestro? *Sonrojo*

Tú: Te estoy diciendo la verdad mi querida Cinderace.

Cinderace: ¿Que... Querida?

Tú: Oye. ¿Te puedo llamar Cindy?

Cinderace: ¿Cindy? Pero eso suena nombre de mujer.

Tú: ¿Y? Tienes un hermoso trasero que toda mujer desea tener, mi linda Cindy. Me da igual si eres solo un macho, para mí eres mi hembra. Desde que evolucionaste no he dejado de pensar en ti por lo bella que eres ante mis ojos.

Cinderace: *Sonrojo* Ma... Maestro.

Tú: ¿Sabes qué, Cindy? Esto me ha dado una idea. ¿Qué te parece si hacemos un "Entrenamiento Especial"?

Cinderace: ¿Entrenamiento Especial?

De inmediato, pones tu pene entre las nalgas de Cinderace, y este se sorprende al ver lo grande que tienes entre las piernas.

Tú: ¿Te gusta Cindy? Mi amigo quiere entrar a ese enorme agujero tuyo que llevas tú.

Cinderace: ¡¡Espera maestro!! ¡¿No crees que esto es muy vergonzoso?! Alguien podría descubrirnos.

Tú: Descuida Cindy. Solo estamos tú y yo. Pero antes, empecemos a calentarnos, ahora déjame probarte.

Le volteas la cara a Cinderace para darle un lujurioso beso, mientras sostienes su pene y lo masturbas suavemente.