¿Cómo convertirte en un suprahumano?

III. SOY UNA GURÚ

Eran las 18:00, cuando Aura junto a sus dos hijos asistieron al cementerio, había muchas personas en Marbella, las velas estaban en filas, y las rosas multicolores invadían cada lápida. Como es tradición en cada día de difuntos, ella y sus hijos limpiaban y alumbraban tumbas que estaban solas, tristes y abandonadas, sean por el tiempo de defunción o simplemente porque era personas no tan queridas. Ella llego a Ecuador desde Tumaco-Colombia, por la crisis que paso su país. Por lo que no tiene fieles difuntos a quienes visitar.

—Mami Aura, está tumba de este angelito luce muy abandonada- dice David (su hijo de 8 años) mientras se denota en su rostro tristeza- ¿Cómo es posible madrecita que tenga 1 año de fallecido y que nadie se halla acordado de él?

—Seguro llegan más tarde davicito, no te preocupes aun esta temprano- le indica mientras empieza a limpiar los vidrios. De pronto Aura siente un escalofrío en todo el cuerpo, al leer el apellido Pinargote Moreira, perteneciente a la madre de aquel angelito, y su mente entró en automático en una especie de Flashback.

Era el apellido de una clienta que había llegado con un bebe de 6 meses a su consultorio esotérico. Pues ella era la tarotista y pitonisa más reconocida de la ciudad. Llegaban a ella personas de todas partes del Ecuador, y de países vecinos. A pesar que ya había pasado más de 1 año, era capaz de recordar aquel apellido, pues era el mismo de su abuela paterna, de quién pudo obtener desde chica toda la información sobre la espiritualidad.

—Mami Aura, ¿Se encuentra bien? - preguntó Alfredo su hijo mayor de 14 años y agregó-la noto ida.

—No es nada mijo, es solo un recuerdo- respondió muy serena. Hasta que se percató que, a la derecha suyo, estaba allí el nombre de la única clienta que no dejo ayudarse en sus 10 años de atención.

—Mijos préndales a ambas tumbas las veladoras de florecitas, las más hermosas....

—¿Segura, Ma? - Le cuestionó Alfredo sorprendido porque aquellas velas estaban reservadas para las lápidas de una pareja de ancianos que estaban en el lugar más recóndito del panteón.

—Al mil por ciento- cerrando sus ojos comenzó a recitar una oración:

"Queridas animas, esto que hice con mis hijos es de corazón por favor, no me vayan a seguir a casa. Solo les pido protección ante aquellos que quieran o deseen un mal en mi"

La familia terminó de limpiar la última tumba abandonada, y al final cerraron la actividad con una oración pidiendo que los familiares de estas personas recapaciten acerca del olvido de sus seres queridos. Al dirigirse todos a la salida a lo lejos, Aura observó a una mujer, y exclamó al aire: "allí viene esa bruja gris". Inmediatamente cerró sus ojos e imagino una esfera de energía color roja en su mano derecha, sintió como desde su ombligo recorrió aquella energía hasta la palma de su mano. En su entrecejo visualizó como esta bola energética golpeaba el entrecejo de la otra mujer, al finalizar Aura pidió a su guía interno que direccione esta energía con el fin que el receptor no la viera a ella.

—Mami Aura, esa señora ¿No es Sonia tu cuñada? - preguntó davicito

— Si, pero lo mejor será regresarnos y evitar que nos vea- tomó a los niños y los dirigió hacia un camino alternativo del panteón

La cuñada de Aura recibió una llamada mientras estaba cerca de la entrada. De pronto debido a la distracción, Sonia se vió en el piso por otra persona que entró desesperadamente al panteón.

—¡Estúpido¡- le gritó aquel chico que la tumbó. Le tomó de la camisa y le miró con una mirada penetrante. "Por personas como tú, es que pido a mi Santa muerte que se los lleven mas rápido" ....

De inmediato el muchacho, comenzó a reírse y expresó entredientes:

— Su no sé qué cosa me podrá llevar, pero al menos no tengo la falda embarrada de mierda como usted. En seguida, aprovechó el bochornoso acto, y se fugó del lugar.