PROLOGO

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Había pasado un tiempo largo desde que las clases en la academia "Hope's Peak" estaban en un largo de haitus, donde ya me aburría de no tener cosas que hacer, y donde los recuerdos de mi amada, regresaban a mí sintiéndome como el hijo de puta, porque no pudo estar más tiempo con ella, me sentía muy mal por eso.

Mientras caminaba en la academia observaba algunos profesores que todavía estaban viviendo en la academia por órdenes de la directora Leah. Y otros que eran nuevos supuse que serían mis nuevos profesores, mientras proseguía mi ruta detalle a una profesora que detalla que aun esta joven y era como sus primeros pinos en la educación.

Escuche el tono de mensajería de mi celular, que me notificaba, que la directora Leah me dio el permiso para salir de la academia, mientras las clases volvían a su ciclo normal. Cuando termine de firmar el documento, sentí como si me hubiera estrellado con dos almohadas grandes y escuche una voz suave y tierna...

—Oye, ten cuidado. Eso no se hace jovencito Lockser...

A escuchar la voz. Respondí.

—Disculpa, solo estaba firmando mi permiso para salir de aquí, necesito liberar cositas, para eso debo regresar a Nápoles.

En ese lapso tiempo, mientras cambiamos palabras, rápidamente guarde mi celular y ella se acercó como insinuando que me quería besarme... La, tome de la mano sin lastimarla, pero en unos segundos ella me aprieta duro la muñeca de mi mano y me da un beso en la frente.

—Vaya, que si eres alguien interesante jovencito. Quiero que regreses cuando termines de hacer tus cosas, porque soy capaz de irte a buscarte. Antes que nada, me presento me llamo. Chisa Yukizome.

—Oye, pensé que me ibas a besar las mejillas o la boca, sabes que la única que me ha besado fue mi amada Adrienna Napoli, como yo le decía de cariño mi amada diosa demonio.

—He oído hablar de ella, moviste cielo y tierra para que la aceptaran aquí, pero cuando conseguiste el permiso ella murió. O no es así.

—Así es, daría mi vida para que estuviera conmigo hacer todo tipo de cosas...

La profesora me hace una seña que me detenga de dialogar, mientras ella mira su celular y firma un documento...

—Jovencito, fue un justo verte, quiero que regreses cuando termines tus cosas que debes hacer en Nápoles, la directora Leah, ya me adelanto que eres muy problemático y no obedeces nada...

Observe a la profesora correr rápido y detalle que usa tacones...

En mis pensamientos.

"Por San Paolo. Patrón de Nápoles. Qué mujer, tiene ese aire de mi amada en sus últimos días de vida"

Mientras seguía mi recorrido por la academia, pensaba como haría para llevar las cosas más importantes como los trajes de mi amada y los míos, que ella me mando hacer para mí, además como llevar los trofeos y demás cosas, solo dejaba aquí algunos libros y ropa que uso para estar aquí durante los días de descanso. Arribe a la cocina de la academia donde entre para prepararme algún entremés, al poco rato abrí la gran nevera que tenía la cocina de la academia y saque lo que necesitaba, además algunos compañeros de academia como Maki Nishikino, Nozomi Toujou, Nezuko Kamado y otros se van a quedar en la academia.

Cuando termine el entremés, lo tome y me senté en una de las mesas grandes que había en la zona de comida de la academia, pase un largo tiempo comiendo cuando detalle que mis suegros ya habían recibido mi mensaje que podía regresar a Nápoles y me escribieron que ellos podrían recibir las cosas y dejarlas en el apartamento privado que tengo allá. Ya sabiendo eso, termine de comer, deje todo lavado seco y limpio y corrí rápido a mi habitación para ordenar todo y enviar todo vía exprés a Italia

Me animé para organizar todo y regresar a Nápoles, mientras organizaba todo iba pidiendo los boletos de viaje para regresar a donde me sentía bien. Ya teniendo todo organizado, llamé a DHL para que me ayudaran con lo que necesitaba enviar. Por obvias razones pagué todo con mi tarjeta de crédito para no tener problemas. Todo salió bien, ya para terminar me di mi última caminata por la academia para despedirme donde es mi segundo hogar, pesé que hay ratos de no sentirme bien aquí. Amo mucho el lugar donde me están educando para mejorar como persona.

Ya pasado el horario que uno tenía permiso estar a fuera, pese al haitus de las clases, los prefectos de la academia tenían órdenes claras de que los alumnos que aún se quedaron se van a quedar obedezcan como si estuvieran estudiando, ya en mi recámara privada me acosté para así podré levántame a las primeras horas de la mañana.

A la mañana siguiente la alarma de mi celular sonó a las 8 de la mañana sabiendo que mi vuelo saldría a las 10. Me levanté de la cama, salte a la ducha, me bañe el cuerpo y terminaba todo para irme bien arreglado. Mientras salía de la habitación, los de DHL ya se estaban organizando todo para el envío. Alisté todo mi equipaje y Salí con rumbo al aeropuerto.

Al poco tiempo de salir de la academia tomé el transporte hacia el aeropuerto, mientras meditaba lo que debía hacer, recibí una llamada de un número local. En mi mente decía.

"¿Quién demonios me llama?"

—Buenos días. Hablo con el joven Gustavo Lockser.

—Sí. Buenos días. Hablas con él. Disculpe quien te dio mi número telefónico

—La señorita Madonna, una amiga que tienes en Italia.

—Veo que conoces a mi señora Madonna. Dime que deseas, ya que pronto llegaré al aeropuerto y tomaré un vuelo de regreso a Nápoles.

—Antes que nada, me llamo Youko Saionji. Y gracias por contestar mi llamada

—Es un gusto hablar de alguien importante como usted mi señora. Dime que necesitas y con gusto te ayudaré.

—Es un favor monetario. ¿Puedes hacerme el favor?

—De poder puedo, pero ahora voy a viajar, dame unos 2 días y me caes a Nápoles y hablaremos de eso

—Muchas gracias, joven, entonces en dos días estaré en Nápoles para ello.

—No. A usted señora.

Al poco rato de terminar la llamada, arribe al aeropuerto, el chofer Salí del auto y me abrió la cajuela del taxi y saque las maletas. Pagué la tarifa y Salí rápido para llegar a la zona de emigración para hacer los papeles, gracias a mi carrera de tenista en la rama juvenil, tenía un poco de ventaja para viajar.

Ya pasado toda la rutina de emigración y demás cosas, me ayudaron para llegar a mi avión. Antes había pedido estar en primera clase porque era lo que había pagado. No quería estar más de 18 horas de vuelo en clase turística. Ya dentro del avión me llevaron a primera clase para estar tranquilo y veía a mucha gente ya conocida de otros lados por obvias razones, no queríamos empezar hablar antes del vuelo, ya que no queremos estresarnos antes de empezar a viajar. Ya todo en orden, nos dan la indicación para el despeje del avión, así comenzar un regreso a la ciudad donde me crie.

Será que mi regreso a Nápoles será para bien o para mal. Solo las cartas del destino lo saben.

¿Un nuevo amor? Sekai SaiojinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora