Hakkai Shiba y Takemichi Hanagaki pensaban que tenían una vida color de rosa, pero el muro de la realidad los golpeo fuertemente al saber que sus "amados novios le son infieles".
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━¿Por qué nos hicieron eso? ━lloraba Takemichi al ver las fotos de...
Ser modelos era complicado, pero más por los fans y los fans obsesionados con ellos.
Hakkai se quejó, mientras dormía.
La argolla de compromiso brillaba en su mano, aunque ambos estaban emocionados por formar una familia.
Ambos vivían tan bien en París, la capital de Francia.
Iban a seguir durmiendo, pero las llamadas constantes ya lo tenían lloriqueando al pobre de Hakkai y a Ran con dolor de cabeza.
-Mon bel amour, lève-toi (mi amor hermoso, levántate)- dice Ran con suavidad, pero lo único que obtiene es a un Hakkai saliendo corriendo al baño, Ran se preocupa al escucharlo vomitar.
-¿Que pasó? ¿Estás enfermo? Hakkai, respóndeme- Ran ayuda a su lindo prometido a levantarse.
-Estoy bien, solo creo que tendremos que adelantar la boda antes de que mis hermanos se enteren de mi condición- Hakkai solo piensa en como sus hermanos pondrán un grito en el cielo cuando se enteren, pero más le importa la opinión de Ran.
-No hemos puesto fecha, además que mañana es tu graduación- Ran estaba más emocionado que el mismo Hakkai- no todos los días te graduas de la carrera que decidiste ejercer.
-Voy a recibirlo por ventanilla- a Hakkai le daba igual, él solo quería pasar tiempo con Ran.
Ran abre y cierra su boca, su desilusión era muy grande, su bebé gigante se iba a graduar de comunicación social, pero no iba a festejarlo.
-No pongas esa cara, para mí lo más importante es que estás aquí conmigo y ese es el mejor regalo, además que no estoy en condiciones para festejar- Hakkai le estaba dando indirectas desde hace días a su pareja, pero tal parece que estaba algo idiota- estoy embarazado, tengo casi un mes de embarazo- Ran se queda quieto por unos segundos antes de abrazar a su pareja feliz.
Ambos sonreían alegremente, celebrando el crecimiento de su familia.
-¿Cuando nos casamos? -pregunta Ran.
-Ya envié las invitaciones, Rindou se encargará de entregar la de Takemichi- Hakkai y Ran suspiran.
-Ya era el momento de que el tonto de mi hermano buscará a Takemichi- ahora Ran comprendía el viaje inesperado de Rindou- ¿Ya se habrán encontrado?
-Espero que sí- dice Hakkai.
Ellos no comprendían la demora de esos dos para reencontrarse, pero Ran agradecía el pequeño empujón de Hakkai a su hermano menor.
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Eran las diez de la noche y la lluvia todavía no paraba en Seúl- Corea del Sur.
