Antojo sexual

Parte 4

Durante su semana intoxicado con alcohol, Harry había decidido no esconderse más, era más fácil decirlo que hacerlo. Su regreso "al mundo de los vivos" lo hizo confrontado a su familia y amigos... ya estaba cansado de que siempre tratarán de emparejarlo con alguien como la chica Weasley.

Sus últimos días en Hogwarts pasaron con perturbadoras insinuaciones de parte de la chica; también, había escuchado a las múltiples parejas sexuales de Ginevra hablar de ella en términos muy vulgares, que guardaban silencio cuando Ronald estaba cerca. Quizás su madre nunca había escuchado los rumores y está era su razón para quererlo emparejar con la chica... esperaba que no.

Otro tema eran los padres de ella, para Molly Weasley era impensable que su hijita querida hiciera algo malo. No había mejor niña que su Ginny. Arthur siempre había malcriado a la chica. La señora Weasley también fomentó en encaprichamiento de su hija por Harry Potter. Quizás ella misma había puesto ideas erróneas en mente de su desquiciada hija. Porque eso era lo que esa chica era... una completa desquiciada.

Recordó uno de esos penosos incidentes ocurridos en Hogwarts la última noche de séptimo año. Ginevra se escabullo en los dormitorios de séptimo año de Gryffindor para "dormir con Harry, su futuro esposo", sólo que se había equivocado de cama y había dejado una escena bastante graciosa y/o repugnante con un Neville Longbottom asustado cuando lo asaltaron en medio de la noche; el chico había sido atrapado por sus compañeros con los pantalones abajo y con una entusiasta Ginevra Weasley haciéndole una mamada. Ronald había estado muy furioso cuando se enteró por un comentario mal intencionado de Dean , había amenazado a Neville Longbottom con torturas y asesinatos, una escena bastante divertida después de una noche de insomnio. Lo cierto era que Ronald había dormido durante toda la conmoción causada por su hermana y la víctima de esta.

Harry no durmió esa noche. ¿Y si Ginevra lo intentaba de nuevo? Mejor prevenir que lamentar. ¿Quién sabe que cosas estuvieron en esa boca? Sintió un escalofrío de terror.

Recordó como, sospechosamente, Neville se encerró en el baño durante al menos una hora. Volvió con una sonrisa de satisfacción que hizo a Harry reírse del otro chico. Al menos ese incidente no salió del cuarto de Gryffindor de séptimo y tampoco puso en peligro la relación que tenía Neville con Susan Abbott, tampoco provocó una pelea a muerte de las brujas implicadas. En todo caso, ahora eran anécdotas divertidas que podrían avergonzar a muchos...

Harry suspiró, viendo cómo se desarrollaron las cosas últimamente.

Él no había vuelto a encontrarse con Tom Riddle. ¿Quería encontrarse con él a solas? ¿Pedir explicaciones? El joven Señor sabía que era mejor mantenerse alejado de su antiguo profesor. Debía ser fuerte y no mostrar los sentimientos que aún tenía por aquel hombre.

~•~HP

En la Mansión Malfoy se llevaba a cabo una peculiar reunión. Lucius Malfoy estaba en su despacho hablando con Tom Riddle; quien, luego de su escape de la prisión de Azkaban, planeaba tomar el control del Ministerio de Magia, aunque sea por la fuerza. Sus planes tomaron un giro distinto a lo planeado anteriormente.

—Con Dumbledore muerto y fuera del camino, sólo las familias del lado luminoso podrían oponerse en su camino al acceso del poder— decía Lucius.

—¿Quiénes son figuras de autoridad ahora mismo?

—Harry Potter, mi señor...

Tom clavó sus ojos fríos en la persona de Lucius Malfoy, este contuvo un escalofrío.

—¿Potter? Dime más sobre él —Tom no sabía si quería obtener más información por curiosidad o simplemente por el pasado. Decidió olvidarse de eso. No era el lugar para pensar en ello.