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Decisiones difíciles

Olga me ayudó a acomodar todas mis cosas en mi habitación, colgamos y acomodamos toda la ropa, zapatos y accesorios que habíamos comprado ese día, elegimos juntas el outfit que llevaría al día siguiente a la escuela y me deseo las buenas noches con un fuerte abrazo, recordé que Olga me había regalado un teléfono para poder comunicarme con ella, comencé a utilizarlo, ya podría comunicarme también más fácil con Phoebe y mis demás compañeros que ya tenían acceso a sus propios teléfonos, incluso Arnold tenía uno.

-Pero creo que no voy a comunicarme tanto con él- dije para mi.

Al terminar de configurarlo me puse una de las pijamas nuevas, era tan cómoda, di un último vistazo a mi habitación, Big Bob y Miriam se habían lucido, sonreí para mí, me sentía sobrecogida, segura, de mis ojos salían lágrimas de felicidad, entes de acostarme me acerqué al espejo con un poco de temor, ¿Vería otra vez a la "Helga fea y flacucha"?, cobrando fuerza me miré, vi una niña bella, vi una sin inseguridades, me vi a mi, me abracé y fui a la cama. El colchón nuevo era suave y cómodo, caí rendida casi de inmediato.

Me levanté antes de que sonara la alarma, como si mi cerebro estuviera ansioso por comenzar el día, me sentía optimista, fui a ducharme al baño, y me alisté, faltaba más de hora y media para que pasará el autobús escolar, entonces decidí poner de mi parte, haría el desayuno y lo comería con mi familia. Llegué a la cocina y Olga ya había iniciado.

-Helga, buenos días, luces preciosa- dijo acercándose a mi para darme un abrazo y tomar mi rostro para observarme bien, sonreí sincera.

-Buenos días Olga, gracias- la solté y me acerqué a la isla de la cocina- ¿En qué te ayudo para hacer el desayuno?- dije 

-Vamos, ya esta lista la masa de los hotcakes, vamos a prepararlos, si quieres pon a freír un poco de tocino y exprime las naranjas- decía sabiendo que faltaba por hacer 

-De acuerdo- contesté

Nos pusimos manos a la obra y cuando Big Bob entró en el comedor 40 minutos después ya teníamos servido el desayuno esperando por nuestros padres para desayunar juntos, Olga y yo sonreíamos satisfechas de nuestra mesa, Big Bob tenía cara de sorpresa y felicidad, como si se sintiera orgulloso, no dijo más y se sentó a la mesa.

-Bien, creo que solo desayunaré con mis dos bellas hijas- nos miró a ambas y nos tomó de las manos

-¿Y mamá?- pregunté

Su mirada mostró una ligera tristeza 

-Se siente mal, tiene un ligero dolor de cabeza, ya comerá algo más tarde- dijo tratando de tranquilizarnos- vamos, comamos-

Durante el desayuno trató de mostrarse alegre y gentil con ambas, Olga trató de no hablar tanto y pude platicarles un poco de la escuela, como las materias que me gustaban y las que eran un poco más difíciles para mi. Olga se ofreció a ayudarme a entender algunas materias antes de volver a la universidad. 

Al terminar de desayunar subí por mis cosas y volví a la cocina a rellenar mi lonchera con un poco de lo que había sobrado, pero ya estaba lista, Olga había preparado mi lonche y Big Bob había incluido 10 dólares por si algo se ocupaba, di las gracias y salí de casa rumbo a tomar el autobús. 

Me sentía nerviosa, que harían mis compañeros cuando me vieran, que pasaría en la escuela ese día, me sentía bella pero no sabía que efecto causaría en los demás, para mi fortuna Phoebe estaba esperándome para subir conmigo el autobús y apoyarme en todo, se veía también algo diferente, se había arreglado también, se veía muy bella. Le sonreí y dije

-Hey Phoebs, te ves muy bien hoy hermana- rió un poco 

-Bueno, hay que aprovechar las compras de ayer- dijo elevando los hombros