¡ uno !

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... Sus labios se estamparon contra los suyos con brusquedad creando como consecuencia una reacción inversa que lo obligaba a querer huir, cosa que pudo haber hecho de no ser por el fuerte agarre en su cintura, él no lo descuidó en ningún momento ni tampoco lo soltó, en su lugar comenzó poco después un suave vaivén en el que el chico estaba destinado a caer así fuera lento, problemático, aunque fuera quizás lo último que lograría obtener del más alto.

Sus ojos se cerraron, finalmente entregándose a aquel beso que llegaría a convertirse en su sentencia de muerte. El contacto comenzó a aumentar; pasando de ser una sencilla presión a un beso necesitado, desesperado. Ambos esperaban eso con ansias sin siquiera tenerlo en mente, simplemente eran cosas que el destino tenía para ellos...

— ¡Maldita sea, al fin!

Y aquí, damas y caballeros, tenemos a un espécimen de nombre Hwang Hyunjin, quien no paraba de dar vueltas sobre su cama como una salchicha en una freidora mientras sacaba todo su lado fanboy con el nuevo capítulo de la última historia de su escritor favorito, conocido por nosotros como Jexnggie.

Pero, ¿cómo no hacerlo? Luego de cuarenta jodidos capítulos los protagonistas finalmente se daban cuenta de su amor mutuo, ¡finalmente dieron ese paso! Ah, Hyunjin estaba esperando eso desde hace mucho ya que como buen lector había leído la historia desde su primera publicación, y esa era la tercera resubida que le había dado, la felicidad que sintió con ese bendito párrafo fue la mismísima gloria.

No había dormido nada por quedarse leyendo pero, ¿a quién le importa? Jexnggie decidió hacer un maratón de capítulos de su obra más leída justo a las tres de la mañana y sin avisar.

Es que Hyunjin no se iba a hacer de rogar con el pedazo de arte que los dioses le estaban otorgando, no, no, no, él iba a leer cada capítulo de cada obra que dicho usuario publicara.

Eran las tres y treinta de la madrugada cuando el muchacho desvelado acabó el último capítulo publicado en su obra destacada, uno el cual le dejó con una duda increíble que le hacía armar cientos de teorías que le frustraban porque sabía que al final ninguna sería correcta y en cualquier momento su escritor favorito le haría semejante plot twist para verlo sufrir desde la comodidad de su hogar.

Negándose a esperar indefinidamente hasta la próxima actualización, porque, como buen autor, Jexnggie también se desaparecía indefinidamente de la plataforma, el chico de cabellos rubios se dispuso a revisar el perfil del autor en la búsqueda de algún anuncio que le dijera cuando saldría la próxima actualización.

Porque sí, acababa de terminar un maratón pero ya estaba esperando la siguiente parte. ¡No lo juzguen! ¡Ustedes son iguales!

De todas formas, para la gloriosa suerte del rubio sí había un anuncio sobre la obra recién leída. Una sonrisa se colocaba en su rostro por la emoción de llegar temprano a algo, cosa que no hacía ni para cosas realmente importantes como sus exámenes, por ejemplo.

Jexnggie publicó un anuncio:

« Hey, adivinen quién sacó un maratón a las dos de la madrugada porque le pareció lo más adecuado... así es.

¿Debería explicarles que esos capítulos que acaban de leer los voy a poner en borradores de nuevo porque se supone que no están listos? No, realmente no.

Tomen todo eso como spoilers y bórrenlo de sus mentes :) »

El anuncio había sido publicado dos minutos antes de que Hyunjin los leyera y si revisabas los capítulos publicados de dicha obra sólo tenían una lectura y un conocido voto por capítulo, ambas cosas iban por el user del muchacho rubio.

── writer crush !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora