Lo que nunca seremos- TAKEMIKEY

Una Pareja

—¡Te dije que no tendrías ningún futuro a su lado Takemichi! Yo te ofrezco todo lo que el no puede, una vida honrada, amor, cariño y sobre todo una familia... El no puede darte una Takemichi...yo si... —le decía Inui mientras acariciaba el alfa que solo observaba en silencio meditando sus palabras, el suero en sus venas y el olor a medicamento lo mareaban.

¿Cuál era la razón de que Takemichi estuviera en el hospital internado?
La razón era Manjiro Hanagaki Sano, el líder de bonten y esposo de Takemichi.

El auto donde viajaba Takemichi había sido interseptado y el secuestrado sólo por unas tres horas, pero lo suficientemente para darle una advertencia a Mikey.

Quién en éste momento estaba demaciado furioso por qué su amado alfa estaba en el hospital y el no podría ir hasta dar con los responsables.

—¡Me importa una mierda que sean las 4 de la mañana, o me traen a esas malditas ratas o los voy a matar a todos! —Gritaba como loco a todos los que podía, su omega estaba inquieto en su interior, no había podido ver a su alfa y por alguna razón lo sentía cada vez más débil.

—Manjiro por favor,ya sabes quienes son ¡vete al maldito hospital con tu esposo! Inui fue con el, pero debe volver a la oficina en un rato... —Mencionó Kakucho furioso con su jefe por ser tan testarudo.

Manjiro se congeló por un momento y giro su vista lentamente para ver a quien se había atrevido a gritarle,pero también por lo dicho por este.
—Dijiste que Inui Seishu esta en el hospital con mi esposo solos...— empezó a desesperarse mientras buscaba las llaves lo más rápido que podía.

Solo emprendió el camino sin mirar atrás y conduciendo como un desgraciado, cuando llegó al hospital sólo bajó del vehículo y corrió a donde sabía que era la habitación de su esposo.

Abrió la puerta pero no había nadie, las sábanas estaban desarregladas, el closet abierto y vacío, un rastro de sangre en la cama donde estaba el suero y el olor a menta de Takemichi con un poco de lavanda, el aroma de Inui...