Chapter three.

294 37 6
                                    

No es normal matar a alguien al instante de una sola puñalada, pero el tiene pericia, ha sido entrenado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No es normal matar a alguien al instante de una sola puñalada, pero el tiene pericia, ha sido entrenado..

Está bien, tú ganas —respondió con voz grave el azabache, apretando los puños y luego le señaló — Pero si no habla rápido, le sacaré las palabras a golpes. ¿Entendido?

Deja de ser tan impaciente, Jeon. No todo se resuelve a golpes — bufó, cruzando los brazos y entró a la habitación .

Te lo preguntaré solo una vez. Más te vale que respondas, o el idiota de afuera te obligará a hacerlo — su voz era un susurro amenazante.

El tipo lo miró con rabia en sus ojos.

¿Dónde está el cargamento? —preguntó Min, su tono endureciéndose.

¡No diré nada! —gritó el prisionero, su irritación palpable en el aire.

Mira, solo intento que esto se resuelva lo más rápido y calmado posible, así que anda hablemos civilizadamente y responde a mi pregunta —insistió.

El contrarío, con desdén, le escupió en el rostro y se rió de él, como si disfrutara de su humillación.

Intenté resolver esto de manera pacífica, pero veo que no cooperas. Así que será a las malas. Buena suerte —dijo, esbozando una sonrisa burlona mientras se limpiaba la cara con desprecio.

Maldito asqueroso —resopló, lleno de rabia, saliendo de la habitación.

Es todo tuyo —dijo, dirigiéndose al más alto.

Caminó sin prisa alguna, escoltado por dos guardaespaldas, mientras su mente se llenaba de ideas retorcidas sobre cómo torturar a la persona que pronto se enfrentaría a su peor pesadilla, todo por haber elegido el bando equivocado.

Al oír pasos acercándose, levantó la mirada y trató de mantenerse firme, pero la oscura y helada mirada que emanaba del azabache lo hizo temblar de temor.

Jeon lo miró con desdén y se acercó al prisionero, su mirada fría como el acero.

N-no diré nada, ya se lo he dicho al otro tipo —balbuceó, dejando entrever su miedo.

Aún no te he preguntado nada, así que relájate —respondió con un tono calmado —¿Cuál es tu nombre?

El silencio fue su única respuesta.

¿Para quién trabajas? —preguntó en el mismo tono sereno.

¡Ya te dije que no diré nada! No conseguirás que suelte ni una sola palabra sobre lo que quieres saber —gritó, su voz temblando de desesperación.

El azabache lo miró con desdén y soltó una pequeña risa. Hizo un gesto con las manos hacia los guardaespaldas, quienes se acercaron rápidamente. Sin piedad, lo agarraron, le quitaron todas las prendas y lo ataron a una columna con firmeza.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 03 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Boxcar [ kooktae ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora