⬪˖ ── ✧˚𝘀𝗽𝗲𝗹𝗹 𝗼𝗻 𝘆𝗼𝘂
❪ a hocus pocus 2 fanfic ❫
❛ Now the witch is back,
and there's hell to pay. ❜
━━━ en dónde veintinueve años después,
una nueva winchester y tres chicas deben
hacerle frente a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❃‧₊˚ ── : capítulo uno, 1653
Agatha dio un respingo cuando la puerta de su hogar fue abierta de un empujón por su hermana mayor, Winifred. Al verla, inmediatamente, Mary y Sarah estiraron el cartel en el que se leían las palabras "bendecido cumpleaños", mientras que Agatha sostenía en sus manos el plato con el postre que habían hecho. En cuanto Winnie cerró la puerta y le dio la cara a sus hermanas, las tres gritaron "sorpresa" con gran alegría.
— ¡Es el peor día de mi vida! — se quejó Winnie, enojada.
— Uh-oh. — soltaron las tres menores al unísono.
Mary hizo bola el cartel de tela para después lanzarlo al suelo, y Sarah colocó sus manos en los hombros de Agatha — Pero Winnie, mira lo que hicimos. — dijo la rubia señalando el plato — Aggie y yo descubrimos que, si trituras pezuñas de cerdo y las mezclas con agua, se crea una sustancia misteriosa. Y Mary tuvo la gran idea de agregar una gota de sangre de cabra. Y mira, se mueve. — Sarah picó el postre con un dedo para demostrar que este temblaba.
— Prueba esto, Winnie. — la animó Mary — ¡Es maravilloso!
— No puedo comer. — Winifred lazó su gorro, y Agatha tomó eso como una señal para dejar el plato sobre la mesa — Estoy demasiado preocupada.
— ¿Paso algo malo? — preguntó Agatha con su usual tono de voz, tan bajo y tranquilo que casi parecía un susurro. Incluso alrededor de sus hermanas era cohibida.
— ¿Los Turner te encerraron en la barranca de heno otra vez? — esta vez la pregunta vino de Mary.
— Peor. Me dijeron que me estoy poniendo vieja, y que debo casarme. Con Jerome Winchester. — Sarah y Mary jadearon, mientras que Agatha se mantuvo callada escuchando atentamente las palabras de su hermana mayor — El reverendo Traske lo arregló. Dijo que era su deber, ya que padre murió.
— ¿Dijiste que no? — Sarah preguntó.
— Por supuesto. Y usé el nombre de Dios en vano. Dos veces.
