Mansión Benson-Valente. 1:43 am
No se oía ningún ruido en la mansión. Todo el mundo estaba durmiendo.
Bueno, casi todos. Hubo una alboroto en el ático. Causado por dos personas solamente.
Sus labios rosados estaban sobre los de él. Sus grandes manos recorrían la espalda cubierta sólo con la tela de su camisón de raso. Simón acercó a la chica. El beso que compartieron fue tierno y se intensificó con el ritmo de los latidos de sus corazones.
Su calor y su frialdad eran como un choque térmico en cada contacto. Cada caricia.
Ya no importaba nada. Durante unos minutos. Por unos momentos. Y esta situación surgió de la nada. Ah, si. Una discusión precedió justo este momento. Pero, como dos animales enfurecidos, no pudieron contener la tensión casi sexual que se había creado entre ellos. Por suerte, uno de ellos recuperó la conciencia más rápidamente de lo esperado.
"No, no puedo.", susurró el moreno, rompiendo el beso.
"No te gustó?" pidió Ámbar.
"Esta no es la cuestión. Es un error lo que estamos haciendo."
"Oye, por favor. No más!", imploró la rubia. "Siempre vos hacés lo mismo."
"Ámbar." Simón miró a la chica seriamente.
"Qué? Solo me estoy preguntando cuál será tu patética excusa."
"Perdona?"
"Ay, no hagas el sorprendido. Vos tenés una excusa al día que arruina cada momento que pasamos juntos. Así que decíme, cuál será tu excusa esta vez para alejarte de mí ?"
"Quieres que te digo todo lo que pienso, estás segura?", respondió Simón irritado.
Ámbar le miró con una pizca de provocación. Ella no lo creía capaz. Él no era así. "Hacélo, te escucho."
"Bueno, sentémonos porque será super pero super largo" se burló el mexicano.
Ámbar cruzó los brazos sin moverse. Su camisón negro, casi transparente cubría ligeramente sus piernas, que retorció mientras esperaba el sermón de Simón. Estaba un poco nerviosa. Porque era la primera vez que no le estaba dando un discurso filosófico, sino que parecía realmente enojado. Ámbar no sabía por qué se quedaba aquí esperándole. O sííí sabía : curiosidad. Y también sabía que no iba a terminar bien.
"No te voy a esperar toda la noche, sabes. Si al final no tenés nada más que decir será mejor que..."
"Uno-" interrumpío Simón. "Haces la vida imposible a Luna desde que llegó a Argentina. Y ahora que sabes que es tu prima es peor y me molesta mucho".
"Ay? Siempre asumí que no me caía bien Luna por razones lógicas y eso no te frenó las ganas de tener algo conmigo." se mofó la chica.
"Dos, finges estar interesada en mí y me incluyes en tu pelea ridícula con Luna. Y yo, como un imbécil, caigo en la trampa!
Tres, me humillas delante de Emilia y Benicio y luego vienes a ponerme cachondo como si nada y como si fuera tu marioneta.
Cuatro, siempre tú negaste delante de tus amigos que hubo algo entre nosotros haciéndoles creer que alguna vez pondrías los ojos en un chico como yo. Y lo mejor de todo es que nos has quemado la pista por puro ego y nunca te disculpaste."
"Fue un accidente y lo sabes", replicó Ámbar.
"Jamás te cuestionas y sigues con tus travesuras de mierda.", continuó Simón, ignorando el comentario de la chica. "Ah si! Estás flirteando con mi enemigo. Un tal Benicio, quizás lo conoces?"
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TAKE ME - LLÉVAME
FanficLa secuela y remezcla de lo que podría haber sido la historia de Ámbar Smith y Simón Alvarez. Una historia llena de odio y amor, de altibajos. Dos temperamentos tan diferentes y tan complementarios. Dos almas perdidas en sus sentimientos que ya no p...