Parte 5

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Bell esperaba felizmente sentado en una silla. Sus manos golpeaban ligeramente la mesa, sus dedos se movían con anticipación.

—La comida está tardando mucho...— Se quejo Bell como un niño pequeño.

—Se paciente

Sentada frente a él se encontraba Riveria.

Su mirada miraba a Bell fijamente.

—Comencemos con las preguntas— Hablo Riveria después de unos segundos de silencio.

—¿Preguntas?... Pero no estoy en un interrogatorio— Bell quiso hacerse tonto y trato de desviar el tema.

—Cancelare la comida

—¡Pregúnteme cualquier cosa, jefa!

—Buen, comenzare— Riveria asintió satisfecha de que Bell por fin cooperaria con ella, por fin se quitaría las dudas que mantuvo por años—. ¿Fuiste tu quien me salvo cuando era una adolescente?

—Si, fui yo— Confirmo Bell sin interés en la pregunta—. Que pregunta más tonta, ¿Acaso eres tonta o algo así?

Bell se rasco la barba en contemplación de su propia pregunta, mientras Riveria lo fulminaba con la mirada por su atrevida declaración.

Sin embargo, un sentimiento especial apareció en el pecho de Riveria al saber que si fue Bell aquel héroe de su pasado. Ya estaba grande para seguir con sus fantasías de adolescente, pero aun podía siquiera pasar tiempo con su héroe.

—Aquí esta su comida

Una camarera se acercó a su mesa y les entrego sus respectivas comidas.

—Gracias linda

—Que cosas dice— La camarera se avergonzó y se alejó de la mesa.

Bell aun con su apariencia desarreglada lucia bien, podría considerarse guapo entre las chicas jóvenes.

—Tsk...

Riveria patio levemente la pierna de Bell, su mirada clavada en el rostro de Bell quien ignoraba todo con gran maestría.

—Te recuerdo que tienes siglos de edad, eres muy viejo para andar coqueteando con chicas jóvenes— Hablo Riveria.

Detrás de sus palabras había un significado oculto.

"Eres viejo, por lo que relaciónate con gente mayor"

—Yo me siento fresco como una lechuga— Hablo Bell comenzando a comer su comida con entusiasmo.

Tenía días sin comer nada, esto producto de gastarse su dinero en alcohol.

—Cuéntame tu historia— Solicito Riveria queriendo saber más de Bell.

Bell levanto la mirada de su comida y observo a Riveria, sus cachetes llenos de comida le daban un toque cómico pero descuidado.

—Veamos... Nací hace.... No recuerdo hace cuanto nací— Bell dudo unos segundos y continuo—, Se que nací antes de la bajada de los dioses, así que tengo más de 1000 años. Era granjero, un día mi aldea fue atacada por monstruos, como hombre participe en la defensa. Tras la lucha me decidí por volverme fuerte, tomé una espada y comencé a entrenar junto a mis hermanos...

...Estuve en la lucha para sellar el calabozo, aunque mi fuerza era muy baja en comparación con guerreros de aquella época. Finalmente bajaron los dioses, luego me uní a la familia Hades, fin.

Riveria proceso toda la historia de Bell y la analizo en silencio.

Le parecía increíble que Bell hubiera nacido en la época dorada de los héroes.

Danmachi: El retorno de una leyendaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora