Starting Bad

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Desde aquel segundo encuentro que tuvieron Dazai y Chuuya se podría decir que a la pelirroja no le caía del todo bien aquel muchacho que constantemente la molestaba luego de sus presentaciones, comentarios molestos se hacían cada vez que se topaban como:

"¿Deseas realizar un doble suicidio?"

"Tu voz es hermosa, que bien seria despertar con tu bella voz susurrandome al oido"

"Quizá deberíamos salir, ya sabes, ir a tirarnos de algún puente o de un edificio"

Y por supuesto que toda esa palabrería terminaba cuando Chuuya le daba sus merecidos golpes al castaño que constantemente la molestaba, y claro, hoy no era la excepción.

-¡Ane-San, dile al desperdicio de vendas que deje de molestarme!.- la pelirroja se puso detrás de la mujer mayor.-

-¡Pero bella Kouyou! No la estoy molestando, solo la estoy invitando a salir.-

Todo quedó en silencio y lo único que se pudo escuchar fue el abanico de Kouyou golpeando la cabeza del castaño seguido de un hombre de lentes golpeando su nuca con un libro.

-Osamu, deja de molestar a la pobre chica, no me sorprende que la tengas harta.- regaño el de lentes redondos.-

-Ve con tu amiguito Fyodor o no sé, pero deja a la pobre Chuuya en paz.-

Detrás de la mujer se encontraba una adolescente pelirroja con una sonrisa victoriosa, por esa vez ella había ganado, pero estaba más que seguro de que la próxima iba a ganar él.

Dazai 0 - Chuuya 1

-¡Chuuya!.- una voz chillona se escucho a lo lejos.-

-Te hemos buscado por todo este lugar enorme y resulta que estabas con tu novio extraño, que perdida.- negó la albina.-

-¡No es mi novio!/¡Soy su novio!.- exclamaron tanto el castaño como la pelirroja al mismo tiempo.-

-Vámonos a almorzar antes de que llegue tu hermano.-

¿hermano? Así que la enana tenia un hermano, pero no tenía ni idea de quien o como era, pero sin duda tenía la esperanza de que ese hermano fuera el hombre que la recogió la primera vez que la había visto.

Por otra parte, Chuuya comenzó a sudar frío, cosa de la cual Dazai se dio cuenta.
Chuuya no había traído dinero para comprar algo en aquella costosa cafetería de la gran institución -y de igual forma no es que le hubiera alcanzado para mucho- además de que ni siquiera había traído su almuerzo luego de haber metido gran parte de su comida en los toppers de su hermano para que este pudiera comer más.

-Hoy no tengo hambre, me quedaré con Ane-san.-

-Pequeña Chuuya, mereces una gran comida luego de haber dado tal presentación.- la mujer rió detrás de su abanico.-

Mientras Chuuya intentaba convencer a Kouyou de que no tenía hambre, Dazai estaba muy callado pensando en la verdadera razón del por qué la de menor estatura no quería comer.

-Bella Kouyou, como disculpa por molestar a su linda ex estudiante, yo le invitaré la comida.- todos quedaron un poco sorprendidos.-

-Hasta que por fin hacer algo bueno, Dazai.- exclamó la mujer.-

-Los acompañaré solo para asegurar de que Dazai no hará una de las suyas.-

-Muchas gracias, Sakaguchi, sirve que revisas la alimentación de esta niña, la veo muy delgada últimamente.-

-Ane-san.- fue interrumpida por un "Shh" de parte de la mayor.-

Y fue así como cinco personas caminaron rumbo a la cafetería que para su suerte, no estaba tan abarrotada como otros días, más sin embargo; había estudiantes de otras escuelas tomando el almuerzo luego de una gran competencia entre todos.

My Ballerina | soukoku AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora