Min Yoongi, Jeon Jungkook, Park Jihyo, Im Nayeon y Minatozaki Sana trabajan como espías secretos para la organización de Kim Taehyung con el objetivo de detener al criminal más peligroso de todos los tiempos.
Park Jimin o más conocido como Alley Cat...
Corrieron y corrieron hasta que encontraron la ventilación, estaba bien camuflada en el techo.
— Mi turno, Sana, por favor — dijo Nayeon extendiendo su mano hacia Sana.
Esta sacó de una de sus botas un pequeño silenciador y se lo entregó a la rubia.
Nayeon sacó una de las pistolas pequeñas del pistolero que estaba al rededor de su espalda y ambas pistolas terminaban a cada lado de sus pechos, conectó el silenciador y apuntó a la ventilación.
Con una gran puntería le dio a 2 de los puntos y esta cayó de un lado, por fin abierta.
Yoongi entendió la señal y con una gran agilidad logró llegar a la ventilación para después tenderle las manos a Sana, esta debía quedar en medio ya que poseía la mayoría de armamento.
Cuando Sana ya estuvo arriba esta ayudó a Nayeon a entrar y cuando entró cerró la ventilación.
Fueron arrastrándose hasta la siguiente habitación, Yoongi vio a Jihyo a la distancia y con ayuda de su zapato pateó la ventilación y esta se abrió, iba a bajar con cuidado cuando sintió un empujón y cayó al suelo seguido de Sana y por último Nayeon.
— ¿Qué fue eso? — preguntó un poco enojado.
— Lo siento — dijo Nayeon — No podía aguantar la emoción — su tono de voz demostraba lo apenada que estaba.
Los 3 se levantaron y Nayeon se acercó a Jihyo para abrazarla, no la había visto en varios meses debido a que esta había ido a una misión fuera del país.
Jihyo la tomó de las mejillas y plantó un suave beso en sus labios.
Nombre: Park Jihyo.
Nacionalidad: Sur coreana.
Especialidad: Combate bailado.
Estilo de pelea: Tipo ofensivo.
Vestimenta:
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— Hay que ir hasta el ascensor principal, después les explico lo que hay que hacer — dijo Jihyo cuando terminó de besar a Nayeon.
Con esto procedieron a correr hacia el ascensor principal, pero antes de llegar encontraron a unos guardias patrullando.
Jihyo les hizo una seña para que se apegaran a la pared.
— Es momento de actuar para mi — susurró.
Nayeon procedió a cantar una dulce melodia, la cual alertó a los guardias y enseguida empezaron a mirar por todas partes.
Jihyo se acomodó en otra pared, dejando una de sus piernas visible y empezó a acariciar esta con suavidad con su mano, subiendo de a poco hasta su muslo, esa imagen llamó de inmediato la atención de los guardias, quienes embobados admiraban la imagen que se les presentaba.
Jihyo salió de la pared y se acercó a uno de ellos, envolviendolo por el cuello con la cinta que estaba alrededor de su cintura para después darle la espalda y bajar en un suave movimiento de caderas, atandolo sin que este se diera cuenta.
Después pasó al otro, puso sus manos al rededor de su cuello y subió su pierna hasta la cintura del hombre, este guió su mano a su pierna, totalmente hipnotizado por la sensual mujer que les estaba bailando.
Jihyo echó su cuerpo hacía atrás en un suave círculo para después volver a subir y empezar a mover sus caderas, el hombre no se estaba dando cuenta de que sus muñecas estaban siendo atadas.
Ya cuando ambos estuvieron atados Nayeon paró de cantar y Jihyo tiró de la cinta, logrando que ambos chocaran y quedaran apretados, Jihyo dio una patada con elegancia pero con bastante fuerza dejándolos a ambos inconscientes.