Cap 18

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Adam después de tener al fin una tarde libre y dejar de ser acosado por esa "madre" después de que arrojara su teléfono a la piscina, fue directamente a ver a su madre y parándose fuera de su habitación, quiso abrir como habría hecho antes, pero la puerta estaba asegurada, fue extraño ya que su madre nunca lo hace, pero sólo respondía un absoluto silencio, pero adentro se escuchaban unas voces conversando, hasta que vio que la perilla giraba y se topó frente a frente a un hombre viejo y canoso con bata blanca que lo saludó para luego irse, lo que causó que entrara de inmediato sin más remedio, para encontrarse una escena de espanto.

La habitación bien arreglada ahora estaba hecha un desastre, con cosas rotas en todas partes, pero le dolió el corazón al ver de inmediato a la persona de su interés tumbado en cama con obvio signos de abuso

- ¡Madre! ¡Madre!

Dongmin miró al niño con ojos llorosos que se postró de rodillas a lado de la cama, su corazón sintió un alivio al escucharlo decir aquello que anhelaba durante días, nunca llegó a pensar que la palabra "madre" le importara tanto.

- Mi niño ¿Qué haces aquí? Se supone que no deberías

Adam observó el maduro y desnudo cuerpo de su madre con moretones de unos dedos marcandose en su blanca piel, de su rostro lindo hecho un desastre, sus labios partidos y con apenas una sonrisa para dedicarle al niño que le costaba el dolor de sus músculos faciales.

Y solo había un culpable, y ese era su padre.

- ¿Qué significa todo esto? - dijo apenas el niño aguantandose las ganas de llorar y solo se mordía su labio inferior

Dongmin no abrió la boca, ya estaba escrito su destino, no importa si Moonbin acaba matandolo por su propia mano igual moriría. Pero el jamás pensó que en todos sus años viviendo en esa casa Moonbin lo violaría.

El día anterior era como todos los demás, sin salir de la habitación, solamente encerrado, hasta que le llegó una carta, una sirvienta de su confianza se lo iba a pasar debajo de la puerta, pero quien sabía que él amo pasaría en ese mismo instante, y vio toda la acción. Arrebató la carta de las manos de la sirvienta y la abrió ahí mismo, su furia subió tanto que abrió la puerta con su llave en ese instante y la cerró de un portazo, le reclamó ahí mismo a Dongmin

- Veo que te da igual que te encierre ¡igualmente buscaras la forma de comunicarte con él!- dijo rompiendo la carta sin abrir en dos arrojando la al suelo - ¡Veo que eres una vil puta que se arrastra a sus pies! ¿Tan bien te lo hace? - dijo tomando a Dongmin en sus brazos y arrancandole la ropa

Dongmin se defendió y araño la cara, eso causó el desenfreno de Moonbin, el cual arrojó a Dongmin a la cama sin más

Pero entre más se defendía, más eran las palizas en el rostro

- Tengo que ver yo mismo que tan bien lo haces, soy tu esposo, tengo que probarte alguna vez, aunque ahora seas más viejo

Dongmin se cansó de forcejear, su condición médica le impedía hacerlo, solo se quedó quieto e intentó como pudo el no llorar, nunca pensó que su primera experiencia se la arrebatarian así.

Su cuerpo ya estaba enfermo y era muy viejo para eso. Con el paso del tiempo su función omega no podía funcionar para la reproducción, con la enfermedad no podía lubricarse y mucho menos entrar en celo. Así que al momento que Moonbin puso su pene a la fuerza dentro de Dongmin, su cuerpo estaba luchando por rechazarlo, lo que causó que se desgarrara y sangrara, pero parecía que a Moonbin no le importaba y seguía penetrandolo sin parar viendo como no causaba una erección en el omega, lo penetraba más y más hasta el momento que se corrió.

Madre SustitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora