𝐋𝐘𝐑𝐀 [Kol Mikaelson]

05

–simplemente te fuiste? Sin decir adios? Nada– Lyra se acercó enojada a Kol

–que haces aquí?– le preguntó

–Davina uso magia para rastrearte pero te escondiste donde la magia no te alcanzaba–

–Lyra debes irte– trató de echarla

–por que te fuiste sin decirnos? Sin decirle a Davina en realidad porque yo no tengo que reclamante nada– negó –por que volviste si no ibas decirnos, por que me das la espalda– le gritó al ver cómo este se daba vuelta

–no me queria ir, tampoco era mi intención volver– la miró –los ancestros no quieren que me vaya– explicó –en cuanto cruce los límites de la ciudad comencé a disecarme, estoy maldito, linda– Lyra lo miró preocupada –los espíritus de los brujos me tienen atrapado, no me dan ni un poco de paz, tengo un hambre incontrolable–

–debe haber una forma– se acercó un poco –solo promete que no nos volverás a dejar–

–deja de hablar como si vos no me importaras, porque si lo haces, no pongas a Davina como excusa– Kol se acercó a ella –me importas, aunque nos conocemos desde hace unos días, me importas– la miró atento –y me podes reclamar todo lo que quieras, podes enojarte conmigo, celarme o lo que quieras, soy solo tuyo, de nadie más– apoyó sus manos en las mejillas de la chica –sos mi compañera Lyra, sos todo para mí–

La castaña lo miró con los ojos cristalizado –nunca me dijeron algo así– susurró –por que no me lo dijiste antes?–

–porque quería que me veas por ser yo, no por un vínculo, quería que me quieras, que me conozcas porque vos querias no por obligación–

–contigo no me sentiría obligada a nada Kol– le sonrió –creo que sería tiempo de hablarte de mí, no sabes nada de mi vida–

–si estas segura entonces te escucho– apuntó una silla al lado de la que estaba él sentado antes –tenemos tiempo–

–como ya sabrás soy una bruja, de nacimiento, no soy como Davina, soy más poderosa– empezó una vez se sentó –cuando mis padres se enteraron de eso, que fue cuando yo tenía cinco, me abandonaron, me dejaron sola en la a calle a mi suerte– vió como el castaño apretaba los puños y esta dejó una mano encima para calmarlo –un año después Carlisle y Esme Cullen me encontraron y me adoptaron, a ellos no les importó mi condición, me aceptaron igual, ellos son una familia de vampiros, todos mis hermanos son adoptados también– explicó –somos seis hermanos, contándome a mi también, Rosalie y Jasper Hale, los mellizos, con los que me lleve bien desde un principió, a ellos les debo todo también– sonrió recordandolos –luego esta Emmett, compañero de Rosalie y su esposo, con él siempre que había oportunidad competiamos en todo, nos gustaba ver quién era mejor, él siempre me ayudó también pero no tanto como los Hale– lo miró –Alice, esposa y compañera de Jasper, ella siempre me ayudaba con la moda y decoración, ambas tenemos eso de que queremos que todo salga bien en cuanto a la decoración eso nos unía– su sonrisa se borró y Kol lo notó haciendo que este le agarre la mano y con el pulgar dejó leves caricias –por último esta Edward, mi ex– susurró –no nos llevábamos al principio pero al pasar los años nos empezamos a juntar más, cuando cumpli los 17 nos pusimos de novios, y duramos 20 años juntos, eso fue una semana antes de que venga para la ciudad–

–se puede saber por que terminaron?– preguntó tenso

–al ser una familia inmortal que no envejece teníamos que mudarnos siempre, cada tantos años– explicó –meses antes de separarnos nos mudamos a Alaska, en realidad volvimos a Alaska, y como siempre, lugar nuevo, vida nueva, empezamos la escuela, todo iba bien hasta que un día volvi a casa, se suponía que iba a estar sola ya que los demás se iban a cazar, cuando fui a la la habitación que compartía con Edward lo encontré a él junto a una chica, desnudos– su voz se quebró –y me fui sin que me noten, no me gusta que me vean mal, prefiero llorar sola, así que me fui a mi lugar donde iba cuando quería estar sola y ahí me permití llorar, de ese lugar solo sabían los Hale y me encontraron, se enojaron con mi ex luego de contarles lo que pasó y juntos volvimos  casa y ahí me enteré de que me estuvo engañando dos meses con su tua cantante–

–es un hijo de puta– se levantó enojado –como se le ocurre engañarte, a ti, con una estúpida humana que seguramente va a morir en cualquier momento–

–ya está, ya pasó– se acercó a él –luego de eso decidí venir aquí, donde sabia que estaba Davina y me iba a aceptar– sonrió agarrando sus manos –el mismo día que vine a la ciudad, conocí a un chico, que se acercó a mí y me empezó a hablar–

–que suerte que tuvo ese chico– sonrió apoyando su frente con la de ella

–mucha suerte– asintió –y mira, ese chico término siendo mi compañero–

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–por que no me dijiste la verdad?– Lyra miró a Kol que estaba tomando de una bolsa de sangre –Davina me contó lo que pasó–

–le advertí que había consecuencias– dejó la bolsa

–los ancestros alteraron el hechizo que ella uso para recuperarte, lo sabias– habló enojada –pero no dijiste como–

–fue un hechizo oscuro desde el principio–

–quieren que me mates cierto? Quieren venganza y claro, quieren que ambos sufran, así que me eligieron a mi– se le quebró la voz –por que no dijiste algo?–

–que querias que dijera? Gracias por salvarme de mi tormento eterno y por aparecer, te adoro, con todo mi corazón, oh y por cierto lo único que quiero hacer es despedazarte Lyra– habló con sarcasmo –y cuanto más me contengo peor resulta– Lyra se acercó enojada

–yo puedo protegerme–

–no, eventualmente lo haré– se levantó –pero hay otro modo– agarró una daga de una campera y un frasco

–de donde lo sacaste?– lo miró preocupada

–lo primero que hice cuando Davina me salvó fue buscarlo– abrió el frasco –para asegurarme de que Nik no pudiera atravesarme con el en cuanto lo hartara– puso unas cenizas encima de la daga y se la extendió –siempre he odiado estas malditas cosas, pero no hay otra opción–

–no– negó con los ojos cristalizados –junto a Vina podemos salvarte–

–se que lo haran– asintió –pero esto es para asegurarnos de que estés a salvo hasta que lo hagas– se acercó –piensa en esto como un corto sueño, será fácil soportarlo si se que me estaras esperando al despertar– llevó una mano a su mejilla mientras ella lo miraba con ganas de llorar –sana y salva–

–esto no es justo– agarró la muñeca del castaño mientras lo miraba –he esperado mucho por esto–

–espera un poco más, recuperame cuando controle mi mente– la miró con los ojos cristalizados –por ahora no puedes confiar en mi y no puedes quererme, no como yo lo hago–

Lyra se acercó a él y lo besó mientras con su mano libre agarraba la daga y se la clavaba. Ambos se separaron y la castaña vió como el caía empezando a disecarse, soltó un sollozo mientras le avisaba a Davina lo que había pasado. Se sentó a su lado y lo miró.

–desearía poder hablar contigo ahora– tocó despacio la daga

Levantó la cabeza al notar como una ráfaga de viento entraba, miró a sus lados cuando el lugar empezó a temblar y se levantó mirando a todos lados, pegó un salto al ver cómo una bombilla explotó e hizo chispazo y al darse vuelta vió que el castaño ya no estaba.

–Kol?– se acercó y al escuchar un ruido miro a sus lados asustada, sintió como alguien la agarraba y clavaba sus colmillos en su cuello, ella gritó tratando de empujar  a la persona pero no pudo, perdió fuerza y cayó muerta en los brazos de Kol

–Lyra?– el castaño la miró asustado al ver a quien había mordido –no, no, no– negó aún asustado y mordió su brazo para luego llevarlo a la boca de la chica –despierta– la agarró de la cara –¡despierta!– empezó a llorar –despierta– la abrazo sin dejar de llorar –despierta–

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Qué les está pareciendo la fic??