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Todos tomaron asiento en la cafetería minutos después de haber entrado a la empresa, hubo una pequeña celebración por el regreso de Jotaro y Kakyoin, igualmente los felicitaron por su boda y les entregaron algunos presentes.


- Muchas felicidades a ambos! - Rohan elevó su copa y brindó por ellos.

- Si, me hace muy feliz verlos juntos! - Polnareff quien también había sido invitado celebró junto a todos.

- Gracias... - el pelirrojo les sonrió a todos los presentes. - También estoy muy feliz por nosotros, igualmente gracias a todos por sus buenos deseos..! - le tomó la mano a Jotaro y el contrario la besó.


Terminaron sus alimentos y cada quien se retiró a sus lugares de trabajo, Jotaro, Kakyoin y Rohan se quedaron en la cafetería para terminar de coordinar los viajes que el pelirrojo se había ganado, algunos eran de otros países y otros eran de esa misma zona, Rohan le comentó que cerca de allí estaba un famoso pintor que quería colaborar con él, así que había programado una cita lo más pronto posible.


- Cuándo es la reunión!? - preguntó Kakyoin con entusiasmo.

- Será mañana! - le sonrió y le mostró su agenda. - Si tienes algo que hacer, puedo retrasarla! No te preocupes por eso. - avisó al ver la cara de confusión que tenía el pelirrojo.

- N-No! No hay problema! Es solo que me asombré por la noticia. - miro a Jotaro. - Entonces mañana volveremos a viajar. - le sonrió tiernamente.

- Si, viajaremos nuevamente... - le devolvió el gesto y besó su frente. - En dónde y a qué horas debemos estar..?

- Es en la capital, él estará en su estudio que se encuentra en la quinta avenida calle dos, el lugar probablemente esté lleno, hoy tendrán una pequeña subasta. - buscó más información y luego les mostró las imágenes. - Al parecer el anfitrión te presentará ante todos, en su anuncio publicitario dice que habrán nuevas sorpresas y un nuevo colega de pinceles.

- Colega de pinceles... - Jotaro se rió en bajito al escuchar esas palabras. - Más creativo no podía ser. - dijo con ironía, a lo cual Kakyoin solo le miró molesto.

- Jotaro... - suspiro pesadamente, sabía que en el fondo su esposo seguía siendo el mismo. - Una más y ya no me acompañas. - lo amenazo y luego volvió su atención a Rohan.

- Y la hora... - revisó su agenda nuevamente. - Es a las ocho de la noche, deben ir vestidos como quieran, solo que deben usar algo que los represente, ya sea individualmente o como pareja. - finalizó cerrando su agenda y al regresar la vista hacia ellos dos se dio cuenta de la monstruosidad que estaba justo detrás de ellos. - ¡LEYLA! - se levantó y rápidamente manifestó a su stand, Jotaro lo vio y el también lo materializó.

- Qué sucede!? - Kakyoin sintió la fuerza que tenían ambos hombres detrás suyo, no podía ver sus stands, pero si sentir la fuerte presencia de estos. - Por favor... pueden irse de acá..! - exclamó sintiendo su abdomen arder, sus rodillas toparon con el suelo y comenzó a agitarse, por lo cual Jotaro se acercó rápidamente y lo tomó en sus brazos.

- Perdóname Noriaki... - se levantó y caminó lejos de ese lugar, no sin antes ver directamente a Rohan. - Fue muy imprudente de mi parte.

- Gracias por no dejarte llevar... - le sonrió y acaricio su mejilla, el rostro del pelirrojo estaba helado y sus ojos violetas ahora se miraban apagados, como si la vida lo hubiera abandonado nuevamente. - Me siento cansado. - sus ojos comenzaron a cerrarse lentamente y cayó en un profundo sueño.


[...]


- Qué sucede Sr. Kishibe!? - La chica le miraba atentamente y sus ojos estaban completamente vacíos.

A𝐮𝐧𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐞𝐚 𝐮𝐧𝐚 ú𝐥𝐭𝐢𝐦𝐚 𝐯𝐞𝐳 (Jotakak)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora