Luego de despedirse salió de la habitación a lo que yo procedí a cambiarme.
Cepillé mi cabello notando que habían ciertos pelos blancos, no le dí importancia alguna.
Al terminar de arreglarme salí de la habitación al estar segura de que no había nadie en los pasillos, nadie puede ver que amanecí con Bakugou, harían demasiadas preguntas.
Caminé hasta la cafetería buscando a los chicos con la mirada, Denki al percatarse de esto alzó su mano.
- ¡Hey, preciosa! ¡Aqui! -Gritó con una gran sonrisa-
- ¡Hola, rayito! -Sonreí sentándome a su lado, en ese mismo instante sentí la penetrante pero discreta mirada del cenizo-
- ¿Para nosotros no hay saludo, muñeca?
- Que tal Kiri -Reí leve y le mostré una sonrisa a Sero- Buen día Sero
- ¿Por qué tan alegre, preciosa? Estás muy sonriente -Preguntó Denki mientras llevaba un cake a su boca-
- Si, ¿Por qué tan feliz? -agregó el cenizo con una sonrisa burlona, sabía a que se refería asi que solo me sonrojé-
- ¡Buen día!
¡Salvada por la campana! O mejor dicho por...
- ¡Mina! ¿Dónde estabas? -habló el pelirrojo con una sonrisa-
- Lo siento, había pasado la noche con Sero.
Pude notar como Sero se atragantó con su bebida y la miró, la pelirrosa le miró y habló.
- ¿Verdad que si, Seeero? -Dijo haciendo énfasis en su nombre-
El pelinegro alzó un poco las cejas al entender y finalmente asintió.
- Si, estábamos... Planeando un ¿Baile?
- ¿Baile? Digo- sisisi, un baile
Pobres, ambos estaban perdidos.
- ¡Ohhh, cierto! Mina me habló de eso hace poco. -mina me miró agradecida y Sero suspiró aliviado, por mi parte solo sonreí leve-
- ¡Genial! Oye preciosa, ¿Ya tienes pareja? -Podía jurar que ví brillitos en sus ojos-
- Ahm.. no -Reí leve- tampoco sé si iré, pero... Estoy segura de que Jirou irá
- ¿¡J-Jirou!? -Se exaltó y se sonrojó a mil-
Todos reimos y terminamos nuestro almuerzo.
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