¿ᴹᴵ ᴿᴱᴬᴸᴵᴰᴬᴰ ᴰᴱˢᴱᴬᴰᴬ? (Bakugou X TN)

13. ¿𝑶𝒕𝒓𝒂 𝒗𝒆𝒛 𝒕ú?.

♡

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 _____.

Apenas lo ví mi semblante cambió por completo y todos se dieron cuenta de ello.

- ¿Qué putas hace el aquí? -Pregunté seria sin apartar la mirada del cenizo-

- Eh... Lo siento muñeca, el quiso venir y nos pareció buena idea para que aclararan un poco sus problemas.

- ¿Aclarar? Creo que quedó muy claro que me odia y yo a el.

El pelirrojo suspiró y miró a su amigo encogiéndose de hombros, el cenizo volteó a verme nuevamente con intención de acercarse.

- Mira, sé que no te caigo bien y que en este preciso momento quieres matarme, pero solo vengo para una cosa.

Lo miré esperando respuestas.

- Ten -Volvió a hablar mientras que estiraba su mano con una carpeta- Esto contiene ciertas respuestas a lo que pasó, sé que no vas a creerme pero solo léela joder. -habló más calmado que de costumbre-

Tomé la carpeta y me levanté.

- Lo haré, pero no esperes mucho de mi. -caminé hacia la puerta-

- Hey, hey, ¿Adónde vas, princesa? -se levantó denki-

Giré mi rostro sobre mi hombro.

- A la U.A. -Abrí al puerta y la cerré a mis espaldas al salir-

- Pero..-

- No, lo siento Kiri, pero no puedo.

- Al menos vuelves a decirme Kiri. -Esbozó una cálida pero leve sonrisa-

Correspondí su sonrisa y terminé por salir.

Salí del establecimiento comenzando a caminar tranquilamente hacia la academia.

Pero seguía sintiendo la incomodidad de una mirada siguiendome por todas partes.

Volteé a mirar hacia los árboles a mis costados buscando de dónde esa molesta mirada.

Suspiré y seguí caminando hasta llegar a la U.A. entré a mi recámara y me encontré con Shinsou dormido en mi cama, seguramente me estaba esperando para leer.

Caminé con cuidado y dejé mi chaqueta sobre mi escritorio para luego sentarme en la cama lentamente evitando hacer mucho estruendo para no despertarlo.

No funcionó.

Estrujó sus ojos y giró su cabeza clavando su mirada en mi.

- Llegaste... Perdón por haber invadido tu habitación, esque dejé mi libro de matemáticas aquí. -Hablaba mientras se reincorporaba y estiraba un poco-

- Oh cierto, disculpa se me había olvidado que lo tenía. -Reí leve y busqué el libro- Y muchas gracias, realmente me sirvió.

- Cuando gustes. -Dijo restándole importancia- ¿Cómo te fue?

- Chismoso. -Se encogió de hombros-

- El chisme es vida, habla.

Se había levantado de la cama dirigiéndose a la silla de mi escritorio la cual tomó con una de sus manos haciendo que el espaldar de esta quedase contra su pecho.