"Todos tenemos una fecha en la que nos destruimos o renacimos, desafortunadamente está fue mi fecha en la que me destruí"
Algunas cosas permanecen en la mente y con el paso del tiempo se olvidan. Mientras que otras están en el alma, que son difíciles de olvidar y que duelen más. Me hice heridas para estar bien contigo, ¿Acaso no fui lo suficiente para ti?, Siempre me pedías que cambiará lo que me hacía a mí, para convertirme en alguien más, ¿Quien era ella? ¿Porque no podías aceptarme a mi? Tener un nuevo comienzo con otra persona que no sea ella, y ser yo está vez, maldigo ese día donde ambos aceptamos amor el uno al otro, o más bien, cuando yo te ofrecí mi amor y tu solo lo sabías fingir.
Era tarde, casi noche y me habías invitado al parque a pasar el rato, yo acepte gustosa ya que estar contigo era lo que más amaba. Pasamos toda la tarde brincando en las hojas que dejaban los árboles, nos divertíamos, éramos solo nosotros dos. Cuando nos cansamos nos recostamos en el suelo y una hoja cayó en mi cabeza, me miraste y la quitaste de ahí, la besaste y me la diste. Dijiste que los pequeños regalos eran los mejores, que el mejor regalo para dar alguien era la compañía y que yo era tu mejor regalo.
Ambos nos miramos para después besarnos con cariño, la falta de aire nos separó, pero tus palabras fueron las que a mí alma ató, preguntaste si podíamos ser novios lo dijiste de una forma tan linda que aún recuerdo aquellas palabras."Antes de que alguien más tome este lugar en tu corazón, permíteme ser el primero que te haga sentir especial. Quiero ser intoxicado con tus caricias y perderme en tu mirada. Antes de que se haga tarde amarrame con besos. Muero por tener un sorbo de tu alma, de tu suavidad.
Se que no me perteneces pero yo te siento mía, así que en este día te pido que seas la dueña de este ser, que solo busca tu compañía".Amé esas palabras, aún las amo. En ese entonces me sentí afortunada de tenerte, de estar juntos, de tener un futuro contigo, pasaron muchas cosas en mi mente que quería hacer contigo, sin pensarlo te dí el si. Esa noche regrese con una inmensa sonrisa a mi casa, pegué la hoja con cuidado en una página de un libro y la puse a mi lado, la bese también y dormí junto a ella, soñé que teníamos una casa y una bella familia. Estaba tan enamorada que no me di cuenta de la tormenta que pasaría después de las semanas.
Al día siguiente no paraba de sonreír, mi madre lo noto y pregunto que tenía, en ese entonces la relación con mi madre era buena y le conté de tí, de lo que teníamos, solo me felicitó y tenía ganas de saber más de tí y verte en persona, pero cada que yo te decía que mis padres te querían conocer ponías excusas. Comenzaste a estar más ocupado cuando salimos, creía que quizá tenías más cosas por hacer pero siempre me mentiste. No me di cuenta hasta dos meses después de la relación, que fue cuando te ví con ella. Sentí un nudo en mi garganta al ver cómo se besaban, como se tocaban, ver qué no era yo la de el lugar. Me dolió más cuando me viste y solo te reíste, pasando a un lado de mi tomaste de la cintura a aquella chica para después irte y dejarme con el corazón roto.
Me pregunte varias cosas, en todos los días que pudiste hacerlo fue ESE día en el que lo hiciste, y justo cuando estábamos por cumplir los dos meses de relación¿Porque lo hiciste? Regrese a casa esa vez llorando deseando desaparecer y solo morir, eras mi primer amor, cómo no me iba a doler verte con alguien más, ni siquiera llamaste esa noche, no hiciste nada. Me desvele toda la noche llorando y recordando la vez que nos conocimos, la vez en qué nos besamos, el día en que te entregué mi corazón.
Al día siguiente me marcaste varias veces, y yo no atendía ninguna llamada, tuve que fingir estar enferma para que mamá no preguntara nada, no me creyó tanto así que tuve que ir a la escuela para que no sospechara.
Fui rota, echa pedazos, en cuanto nos vimos yo me aleje de tí, me fui a la biblioteca de la escuela y tu fuiste detrás de mí, gritabas mi nombre por los pasillos no te importo que todos comenzarán a chismear por ahí. Para perderte de vista me había metido en la biblioteca de la escuela yendo al últim pasillo donde casi no llegaba la luz y nadie visitaba, creí que no me ibas a encontrar pero lo hiciste, te acercaste a mi y me diste un abrazo, ahí me derrumbe, en silencio me escuchabas llorar, no quería tenerte cerca pero a la vez quería que me dieras un beso y me dijeras que lo que ví era una mentira. Cuando termine de llorar tus únicas palabras fueron "lo siento" para después besarme, ahí no me importo si tú me hiciste llorar, lo que me importo en ese momento fue que éramos de nuevo nosostros, que equivocada estaba, la relación siempre fue más de dos, lo sabía pero no lo aceptaba.
Estoy conciente de que nada dura para siempre, pero yo quería que lo nuestro fuera eterno. Me aferre tanto a eso que poco a poco cambie mi aspecto para que no buscarás a alguien más, y que solo fuera yo que solo tuvieras ojos para mí.
Cuando quisimos o más bien quise volver a empezar contigo, hice todo lo que me pedías así creía que no te irías y que a mi lado ibas a permanecer.
¿El amor es ciego? O ¿las personas que se enamoran son ciegas? Pienso que somos nosotros porque incluso viendo las luces rojas no nos alejamos y nos aferramos a algo que nos hace daño solo por qué lo amamos.•°•°•°•°•°•°•°•°
Se escucha la puerta de la habitación del hospital para acto seguido entrar el lindo enfermo que me atiende.
–Perdona si no pedí permiso ya sabes que bueno este es mi trabajo y bueno tu entiendes ¿no?– solo asentí y el entro a ponerme el suero, se acerco a mi camilla y a los tubitos de está. Lo mire hacer su trabajo, tan lindo que se veía concentrado creo que noto mi mirada porque de un momento a otro lo ví tan inquieto, así que para no molestarlo solo mire a otro lado.
–Ya acabe este ¿como te sientes ahora?–no dije nada y solo alce los hombros.
–mmm okok el trato silencioso de nuevo y yo que pensé que ya habíamos progresado con algo. Levanta tu mano derecha si estás bien, levanta la izquierda si te sientas mal y levanta ambas si no sabes cómo te sientes y quieres que me vaya.– acto seguido levanté ambas y pude ver cómo su rostro cambiaba a uno indignado.
–Ok ok ya entendí no te molesto más,pero volveré ya que es mi deber cuidarte. Nos vemos en la hora de la cena–. Se fue caminando de espaldas y cerró la puerta lentamente, eso fue raro pero lo entiendo ya que como enfermero debe cuidar y alegrar a sus pacientes¿no? aunque ahora no quiero la compañía de nadie.
Más tarde ese mismo día vienen a revisar que tan bien me encuentro, aunque los resultados sean los mismos o peores que ayer es algo a lo que siempre tengo que estar viviendo, las inyecciones constantes, horas y horas sentadas esperando a que el suero termine de estar en mi sistema, compañía de la cual no me agrada estar, comer y pasar la mayor parte aqui en la habitación.
Raras veces salgo al patio donde están los demás a observar las flores que están ahí, es increíble la cantidad y tipos de flores que se encuentran hasta el momento todas son mis favoritas pero ninguna especial. Lo unico que me gusta del jardín además de las flores es la tranquilidad que me hace sentir, con tan solo verlo es suficiente para yo estar en paz, para yo estar bien.
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¿Miedo a amar?
Teen Fiction¿Porque algunos tenemos miedo a cosas tan simples? no es como si nos fueran a hacer daño ¿o si?. Eso creía yo, pero ahora me di cuenta que incluso lo inofensivo, nos puede dañar.