Engañando a mi mejor amiga (Luke Hemmings)

Capítulo 11: El reencuentro.

Reencuentro

Pasado una semana yo seguía triste, Luke no regresaba y tampoco me llamaba. Creí que mi vida ya se iba a acabar, que estaba al filo de la muerta. Esa mañana, cuando me desperté, oí el timbre, no quería abrir la puerta, tenía mucha pereza, pero supongo que tendría que abrirla. La abrí y no me lo pude creer, me llevé una gran sorpresa era Luke. Él se abalanzo sobre mí y me abrazó, yo derramé un par de lágrimas, estuvimos abrazados un buen rato, no quería dejar de abrazarlo, pero paré y le dije:

-Pensé que no volverías, has tardado mucho en volver.

-Te he extrañado un montón. Pensé que ya me habías olvidado.

-Me he acordado de ti, todos los días.

-Tenía ganas de verte.

-Soñé con este momento, muchas veces.

-Pensé que habías pasado página y que estabas con otro..

-En mi corazón solo hay una persona y esa persona eres tú.... Yo pensé que al irte con Abe, pues la ibas a querer más y yo iba a ser la engañada.

-Eso nunca.

-Bueno, no te quedes ahí, pasa para dentro.

Entró a mi casa y le dije:

-Me acabo de levantar de dormir y estoy hambrienta, si no te importa voy a desayunar.

-Vale, yo me quedaré en el salón.

Terminé de desayunar y cuando fui al salón, me encontré a Luke dormido. Estaba muy lindo así. Subí a mi cuarto y cogí una manta, entonces se la pasé por encima. Debía de estar agotado. Se despertó a media tarde y me dijo:

-Creo que me quedé dormido.

-Pues, sí. pero, no pasa nada.

-Estoy hambriento.

-Te haré algo de comer.

-No hace falta, yo ya me voy.

-No en serio, quedate.

Hice una pizza y nos la comimos. Me dijo:

-Estoy muy cansado.

-Quedate a dormir.

-¿De verdad que puedo?

-Claro.

Yo también tenía sueño y le dije:

-Vamos a dormir.

-¿Dónde voy a dormir?

-En la cama, supongo.

Él se fue y se acostó en mi cama. Yo me acosté a su lado. De pronto Luke pasó sus brazos por mi cintura y me empujó contra él, me besó en el cuello y me dijo:

-Buenas noches.

Luego se quedó dormido, a mí me costó dormirme, no estaba acostumbrada a dormir sola y mucho menos abrazada de alguien.