11

500 42 0
                                    

Maxine estaba enojada con su hermano, no sabía como se metía en tantos problemas, ni siquiera es como si quisiera que pasaran.

Su nombre había salido en el cáliz de fuego hace unas semanas y tuvo que investigar todo sobre el torneo y nunca había pasado algo como eso.

—Max, cálmate.

—¡Cómo quieres qué me calme Harry! —Gritó Maxine— ¡Intenté todo pero no hay nada que hacer! Es prácticamente imposible sacarte del torneo.

—No es como que me vaya a morir.

—Pero personas si han muerto.

—He estado cerca de la muerte muchas más veces de las que debería.

—Si. Y por ese mismo motivo me preocupa, por lo menos te podré ayudar —añadió sentándose junto a su hermano en el sillón de la sala común de Gryffindor.

Era poco común verla allí, dado que a Maxine no le gustaba meterse donde no le correspondía, pero era su hermano, del que todo este asunto se trataba, debía apoyarlo.

Pasos sonaron en las escaleras de las habitaciones de los chicos, apareció Ron por ese espacio y rodó los ojos, Max ya harta de la inmadurez del pelirrojo le dijo: —Madura un poco Ronald, en serio.

Harry por su parte no le dijo nada a su hermana, era muy terca como para que le dijeran algo.

sweet notes ─── george weasley ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora