¿A que le temes?

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A veces pienso que la vida es muy extraña... no, no es la vida la que es extraña... es mi mejor amiga la que la hace extraña.

No se como es que estoy al lado de alguien tan raro y me gusta, tal ves la rara no sea ella sino yo, pero me gusta así ¿saben?.

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Salí de la tienda con el pantalón rasgado y el pelo enmarañado, Naomi estaba junto a mi, no creo que hubiera percibido mi mal humor pues iba pisando baldosas de dos en dos. creo que el día no podía empeorar... a espera si,es tarde, me veo como pordiosera y tengo que hablar con mi padre. No es que piense que eso este mal, lo mal es que invitara a Naomi sin caer en cuenta de que... ¿y si el se ponía a hablar lo que había ocurrido en Canadá? seria lo ultimo que querría hoy y toda mi vida.


llegamos a la casa y mi papa estaba en la sala esperándonos.

-¡¿Santo cielo, que te paso?!- dijo mientras se paraba de un salto del sofá, lo mire y luego mire a Naomi, le puse los ojos en blanco y subí a mi habitación a arreglarme - Fuimos de compras- dijo Naomi entusiasmada- ah... eso lo explica todo- contesto mi padre mientras hablaba con Naomi en la sala. al subir a mi habitación me quite los pantalones y la camisa, luego los tire sin mirar a donde caían, me cambien de ropa, me recogí el cabello con una moña y baje a la sala.

Cuando llegue ellos ya habían preparado el comedor y me esperaban para comer.

-Y... ¿me quieres contar que te ocurrió Rebecca?- tome un poco de agua y lo mire serio - una señora tomo por accidente la ropa de Naomi, era extranjera y pensé que hablaba ingles así que se la pedí amablemente. el problema empezó por que no me entendió y se la metió bajo el brazo, la tome y empezó a gritar, me sacaron y al caer se rasgo el pantalón- dije con amargura, Naomi miro a mi padre muy entusiasmada - pero no se preocupe, el chico de la tienda me ayudo a recuperarla, es muy amable y supeeeeeer lindo, ademas me dijo que había una promoción de llaveros muy monos!- decía mientras sacaba de su pantalón sus llaves acompañadas de un muñequito de una vaca con óvalos rosa en las mejillas.

harta de la conversación que entablaban esos dos deje los cubiertos y mire a mi padre seria - ¿de que era sobre lo que querías hablar?- los dos se callaron y el me miro- a ocurrido algo en el trabajo y...- me levante de la silla y lo mire con los ojos vidriosos - ¿no querrás decir que me iré de nuevo a Canadá verdad? dime que no por favor!- Naomi nos miraba sin entender nada. -Rebecca cálmate, no lo haré, pero si estarás un tiempo sola- sentí que todo mi cuerpo se relajaba y volví a respirar -por un momento pensé... pensé que volvería a ocurrir- dije intentando que la voz no me sonara entrecortada, mi padre resoplo y me respondió -resulta que tengo una conferencia y tengo que estar haya la otra semana, el viaje es un poco largo pero no te preocupes, estaré llamándote seguido y también..- le conteste antes de que pudiera terminar la frase- papa, no necesito que traigas a alguien, ya estoy grande y ademas tu mismo lo dijiste, nos llamaremos seguidos- mi padre me miro dudoso, - sera nuestro código, lo prometo- dije mientras trazaba una "x"en mi pecho - sera nuestro código...- repitió y luego miro hacia la mesa, sonrió como si hubiera recordado una cómica anécdota de su pasado; me miro y asintió.

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Al acabar la cena Naomi se marcho. En mi cama miro por la ventana, la verdad odio esta habitación, es fría y la luz de la luna se filtra a través de la ventana y crea formas escalofriantes. trato de no pensar en eso pero no puedo, salgo del cuarto y camino por la casa, mi padre se durmió hace un rato así que trato de no hacer ruido, recorro la casa de abajo hacia arriba buscando consuelo, cualquier parte de la casa es mejor que esa habitación, subo las escaleras y termino de nuevo en mi cuanto, me siento contra la pared dispuesta a no acostarme en esa cama fría y dura, miro por la ventana en la que ahora cae una lluvia casi infinita, cierro los ojos y me abrazo las rodillas.


No entiendo porque la gente se esconde de la lluvia, sin ella todo seria seco y árido, y siempre que se marcha deja un arco iris. A mi me gustaría se como la lluvia, para tocar a la gente y conocer sus pensamientos, sueños y temores... quienes son y que quieren ser, pero hasta yo se que la lluvia en algún momento termina.


Algo detrás de mi cruje, abro los ojos mi miro a la pared, me arrodillo y empiezo a tocarla, noto que hay unas hendiduras sobre el tapiz, empujo un poco mas y se rompe las esquinas dejando ver la forma de un rectángulo horizontal, busco en el centro del rectángulo alguna... Aja! hay un hueco! pero... tiene una forma extraña, no se si es el de una perilla o una llave...


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⏰ Última actualización: May 10, 2015 ⏰

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