I Don't Give a Fuck

Primer día locas experiencias.

-¡Señorita Haze despierte!- escuche un golpe sobre el tablero, levante mi cabeza de los brazos en el pupitre y mire en todas direcciones, -La ecuacion x-2x-8=0 es igual a x=4 y x=2 - los estudiantes se veian igual de aburridos como siempre, de no ser por la piel tono rosa y la sangre que pasaba por sus venas, se podria decir que parecian zombies desparramados sobre el pupitre esperando a que acabara su sufrimiento - Eso es todo, nos vemos la proxima semana, no olviden estudiar para los examenes de la otra semana- todos los estudiantes tomaron sus mochilas al mismo tiempo, como esperando la palabra magica del profesor que los pondria en libertad para disfrutar su viernes de locos - Pss...Rebecca- era Naomi, mi amiga, bueno de hecho, la unica que tenia, eso de hacer relaciones con la gente no se me da muy bien.

- Recuerda que pasan las vacas y no dejan leche- dijo entre susurros.

-¡¿Que?!

- P-U-E-D-E-N S-A-L-I-R - fueron las palabras magicas del profesor que formo una avalancha de estudiantes enloquecidos por salir. Naomi me jalo del brazo corriendo a toda velocidad -RUN BITCH RUN-.

Corriamos por los pasillos lo mas rapido que podiamos, evadiendo los diversos estudiantes que salían de las aulas de clase sin saber lo que se les avecinaba, cuando se dieron cuenta de la avalancha humana ya era demasiado tarde, fueron arrastrados por el grupo de estudiantes enloquecidos por salir. De vez en cuando miraba hacia atrás solo para ver que la estampida se hacía más y más grande con cada salón que pasabamos. Naomi se resbaló con las baldosas recién enceradas y pulidas por el conserje que en ese momento bebía un café al lado de un letrero que decía: Cuidado, piso mojado.

Al caer golpeó su pierna, justo antes de que llegáramos a la puerta de salida.

-¡Sigue sin mi!- dijo mientras la estampida de estudiantes se acercaba más y más

-¡Ok!- conteste y salte sobre ella solo para salir corriendo por mi vida hacia la puerta de salida

-Esta idiota, ¡Se suponía que tenías que ayudarme!

- ¡Dijiste que siguiera sin ti!

- ¡Solo quería formar un momento dramático, ¿es que no ves películas o que?!

Regrese sobre mis pasos y la ayude a levantarse, corrimos hacia la puerta y extendí mi brazo mientras avanzaba para empujarla y por fin salir.

Al cruzarla, no tardo mucho tiempo para que la estampida de estudiantes también lo hiciera, y desde ahí, como si de un embudo se tratara, todos los estudiantes se dispersaron en diferentes direcciones.

Exhausta y respirando bocanadas de aire, arroje la mochila al suelo y me lance sobre el Prado para descansar; A nuestro lado pasa lo que parece ser otro estudiante que se salvó de la avalancha humana, pero este no se veía agotado, esbozó una leve sonrisa y siguió caminando, no pude evitar fruncir el seño.

- ¿Se burla de nosotras?

- No lo se, pero si lo encuentro en la calle lo violo - respondió Naomi aún recuperando el aliento, la mire con expresión de " que mierda pasa en tu cabeza", mire hacia el cielo celeste y cerré los ojos...

Cuando sentí que había descansado lo suficiente, todos los estudiantes se habían ido ya, menos Naomi, que estaba sentada a mi lado arrancando el Prado y jugando con el, decidí levantarme y disponerme para ir a mi casa. Somnolienta tome mi mochila y me levanté del Prado restregando mis ojos con las manos y suspire, cuando lo hacia mire mi reflejo por la ventana de una de las aulas de clase, "pero que diablos" pensé mientras llevaba las manos a mi cabello, - ahora si eres toda una madre monté - bufo Naomi mientras reía a carcajadas, y en parte tenía razón, tenía una ensalada en mi cabeza, todo mi cabello estaba cubierto de pedazos de Prado que Naomi me había colocado mientras descansaba - ¡¿qué carajos te pasa grandísima genio,cuantos años tienes, ocho?!- sacudí mi cabeza como si estuviera en un concierto de metal, pero aún así el Prado no salía del todo.

Camine por el sendero en dirección a mi casa, Naomi me acompañaba unos metros atrás tapando su boca para que no escuchará sus carcajas, pero aún asi se mordiera la lengua su risa se escucharía dos kilometros a la redonda, era realmente fastidiosa. Su casa quedaba unas cuadras cerca de la mía, por lo que siempre tomábamos el mismo camino juntas. Al caminar cerca de veinticinco minutos cerca de Naomi, ya estaba lo suficientemente fastidiada como para escucharla un segundo más, tome mis audífonos y los subí al máximo volumen el resto del recorrido hasta mi casa, cuando la casa alfin se divisaba Naomi y yo separamos nuestros caminos.

Entré en mi casa, al parecer no había nadie, me dirigí a mi habitación y cerré la puerta tras de mi y lance la mochila al suelo, estaba realmente cansada así que hice mi típico ritual que consistía en bañarme colocarme ropa ligera y recostarme en la cama mirando el techo color blanco. Esta vez ocurrió algo diferente, llegaron a mi mente imágenes confusas y borrosas de una chica llorando y otra riendo, después una imagen..."el estudiante sonriente", se resaltaban sus ojos amarillos, el resto del cuerpo se difundía en la oscuridad de un fondo negro - ojos amarillos...- dije en voz baja -podría ser...- me levanté de mi cama de golpe.