✰𝙲a𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 3✰

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Cuando terminaron todos de cenar Hu Tao empezó a insistir.

-YA COMIMOS ¡DIME, DIME!

-Mmhh..no sé. Primero tendría que ir a ducharme.- Dijo Zhongli aguantando la risa al ver a su hija claramente enfada y haciendo un berrinche.

-¡No es justo! ¡Dijiste que me dirías después de cenar!- Reclamó la castaña.

-Después de cenar abarca todo lo que queda de día ¿me equivoco? - Dijo el castaño con una sonrisa inocente.

-ENTONCES APURATE- dijo arrastrándolo al baño.

Fue corriendo a buscar una toalla y cuando volvió con esta se tiró a la cara para después cerrarle la puerta antes de que pudiera decir cualquier cosa.

El castaño para hacer esperar más a su hija empezó a desvestirse lentamente. Cuando terminó puso a correr el agua para que la bañera se llenará y quedarse ahí un rato. Le gustaba molestar a su hija porque era muy impaciente.

Estuvo ahí aproximadamente unos 25 minutos hasta que escuchó que alguien tocaba la puerta.

-¿¡Ya terminaste!?- preguntó Hu Tao.

-¡Ya casi!- le gritó desde la bañera.

Se decidió por salir porque no le gustaba la sensación de estar mucho tiempo en el agua. Salió de la bañera, se seco y vistió dejando la toalla en su cuello para que las gotas no mojaran su polera.

Abrió la puerta del baño lentamente y Hu Tao derrepente apareció asustandolo.

Al parecer lo estaba esperando.

-¿¡YA TERMINASTE!?-gritó entusiasmada y con una gota de desesperación.

Zhongli suspiro-Ya no te haré esperar más, vamos, sígueme.- le dijo haciendo una seña para que la siguiera.

-¡YEIII!- La castaña estaba muy emocionada y empezó a dar vueltas al rededor de Zhongli porque iba muy lento.-¿¡CUANTO MAS TE VAS A DEMORAR EN CAMINAR AL PRIMER PISO!?-dijo desesperadamente bajando lentamente las escaleras con su padre enfrente, por esto no podía caminar más rápido.

-No seas impaciente ¿Que te he dicho de correr en las escaleras?- se detuvo y se volteo a mirarla a la mitad de los escalones.

-SOLO DEDICATE A BAJAR- se miraron por un par de segundos y el castaño siguió bajando al mismo ritmo de antes.

Al llegar al primer piso se dirigió a la entrada de la casa. Hu Tao no entendió hasta que vió como metió las manos a los bolsillos de la chaqueta y sacaba dos papeles que en primera instancia no alcanzo a revisar bien que eran pero se podía hacer una idea.

-¿Cómo era que se llamaba este ido-..? -trató de hablar pero fue interrumpido por una castaña muy emocionada.

-TARTAGLIA -gritó el nombre de su querido y tan mencionado cantente.

-Pues mira lo que me he conseguido de casualidad..-dijo para luego sacar las manos de su espalda y mostrar dos entradas para el concierto de Tartaglia.

Hu Tao no podía estar más feliz y no enconcotro mejor reacción que gritar y agradecer.

-¡MUCHAS MUCHISIMAS GRACIAS PAPI! ¡TE QUIERO MUCHO!-dijo mientras daba saltitos y abrazaba a su padre.

A este le hacía muy feliz ver a su hija así de emocionada así que para él cada peso valió la pena.

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Un joven de 22 años con un cabello color cobrizo muy lindo y llamativo se encontraba en un escenario lo suficientemente cansado para lamentarse haber aceptado hacer una gira mundial.

Así es, este es Tartaglia, o Childe cómo lo llaman sus pocos amigos.

Este chico de hebras naranjas estaba terminando su segundo y último show en Inazuma. Días después se estaría encontrando en Liyue y le hacía bastante ilusión conocer esta nación. Aún que tenía que admitir que no tenía tantas ganas de seguir haciendo conciertos, presentaciones y entrevistas. Le agotaba demaciado y el ya se sentía exhausto cuando todavía le faltaba ir a Liyue, Natltan y Sumeru.

Estaba harto de todo esto pero no podía hacer nada contra ello. Hacía todo esto por su familia aún que no sea la mejor.

Cuando terminó la última canción el público no dejaba de pedir otra más pero el sentía que se iba a desmayar en cualquier momento.

-¡Lo siento mucho! ¡Ya me tengo que ir!- exclamó jadeante a travez del micrófono.

Se escucharon sonidos de tristeza por parte de la multitud formado principalmente por chicas. Una de estas le tiró un brasier y él no sabía que hacer así que solo lo tomo de una esquina.

-Gracias..?- dijo con una expresión de incomodidad bien disimulada mientras se giraba para ir hacia las escaleras del escenario para bajar, no sin antes despedirse.-¡Adiós Inazuma! ¡Cuídense!-más gritos por parte del público.

Al bajar varias personas del equipo lo felicitaron y alagaron pero el esperaba a que su familia de Snezhnaya lo llamara y le dijera que lo hizo increíble, eso lo haría verdaderamente feliz. Cómo siempre no recibió nisiquiera un mensaje de texto.

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Childe estaba empacando sus cosas del hotel donde se estaba quedando en una maleta, mañana saldría su vuelo a Liyue y quería dejar todo listo para disfrutar un poco más de su estadía en Inazuma.

Cuando terminó escuchó que alguien tocaba la puerta, abrió y vió a Ekaterina, su manager.

-¡Hola, Eka!-la saludo de forma energética esperando que hiciera lo mismo al menos amablemente.

-Hola, hoy tiene la agenda libre, si quiere le puedo avisar a Vlad e ir a dar un paseo por la ciudad de Inazuma.- avisó la de cabello trenzado llendo directo al grano.

-Bueno, avísale porfavor- respondió un poco seco pero Ekaterina siempre era muy seria así que poco le importaba. Si le hablaba así el sería igual.

Después de la pequeña charla que tuvo cerró la puerta y se dirigió a su cama para esperar a que le autorizaran salir. No tenía permitido salir sin avisar y menos sin supervisión. Se acabo acostumbrando, aún que de todas maneras le era molesto ser tratado como un niño pequeño que no podía salir sin sus padres al parque.

Espero unos minutos y después escucho que tocaron la puerta nuevamente. Abrió y vió a Vlad esperándolo para salir.

-Ya está todo listo ¿adónde desea ir?-preguntó de forma educada el rubio.

-¿Y si solo vamos al centro para ver algunas tiendas?- pensó en voz alta el pelinaranja.

-Como prefiera- A veces le molestaba que todo dependiera de él.

-Entonces vamos al centro nada más.

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Pasearon por la ciudad de Inazuma toda la tarde. Childe le preguntaba a Vlad cualquier cosa que le pareciera interesante. En Snezhnaya eran un poco aburridos al punto de vista del pelinaranja así que le gustaba lo cálido que era en Inazuma, la gente era amable y muy educada. Varias personas se le acercaron emocionados al ver al idol para sacarse fotos y que le firmaran autógrafos, lo que no le molestaba pero a veces solo quería una tarde normal siendo un chico normal y haciendo cosas de jóvenes normales.

Cuando ya habían recorrido gran parte de la ciudad volvieron al hotel a descansar porque mañana sería un largo vuelo.

-1149 palabras-

Acá otro capítulo, perdón si tardo mucho pero no tenía mucha inspiración HAHDJAJD

Atte: Kaeฅ⁠^⁠•⁠ﻌ⁠•⁠^⁠ฅ‹3

Idol‹3 || AU Tartali Donde viven las historias. Descúbrelo ahora