Amor Después De Años// Boschlow,Lumity

Capítulo 19-. ¿Qué somos?.

Yo era torpe, muy muy torpe pero ...
Aún así de torpe Boscha se fijo en mi.

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La mano de la pelimagenta se movio de una forma perezosa, apago el molesto despertador el cual marcaba las 7:30 am.

Se sento de golpe pensando en qué tenia qué llevar a Tae a la escuela; que ya era muy tarde. Pero vió en la pantalla de su teléfono el mensaje, Amity lo había llevado a clases.

Era verdad, se había olvidado qué estaba en casa de la Blight, se dejo caer de espaldas suspirando para volver a dormir. Hasta qué sus piernas comenzaron a doler y los recuerdos la golpearon.

Su piel rosada sobre sus mejillas ahora estaba enrojecida; miro hacía su lado derecho para poder corroborar y ahí estaba. Acostada boca abajo, roncando y con un rastro de salvia desde la comisura de sus labios hacía la almohada.

Willow parecía descansar plácidamente; cómo aquellos días cuando se quedaban juntas. Sonrió, Boscha sonrió emocionada y enternecida al verla dormir, Tae solia dormir de la misma forma.

Se acomodo; quedando sobre su costado derecho para poder verla mejor, todo rastro de enojo había desaparecido y ahora sentía meramente amor.

- Quédate... Quédate y no te vayas nunca - La omega murmuro, dió un pequeño beso a la punta de la nariz de Willow, provocando qué está se moviera.

Hasta separar lentamente sus parpados; dejando ver el par de orbes verdes qué parecían enamorar más a la omega.

- Buenos días - La voz de la azabache era apenas audible, para sopresa de la pelimagenta la atrapo entre sus brazos.

- Buenos... Buenos días - Boscha estaba segura qué su rostro se encontraba casi tan rojo cómo el de Amity cuando solían molestarla.

Ambas se quedaron quietas en esa posición; sus respiraciones era todo lo qué rompia la quietud. Sin ninguna animandose a decir alguna palabra.

— ¿Ahora que?.

La voz de Boscha era un débil murmuro, sintiendo un nudo en la garganta por el miedo.

— Bueno deberiamos tomar un baño y buscar a nuestro hijo — Los cariños de Willow sobre su cabello le gustaban, lo qué antes era un doloroso recuerdo ahora era una dulce realidad.

— Está bien pero .. tendremos qué ir por un desayuno juntas.

— Okey lo haremos.

La omega sintió el agarre ser perdido, vio a la alfa levantarse temblando ligeramente quiza se acabarían resfriando.

Perdieron medía hora más en el baño, no podían quitarse las manos de encima justo cómo en su juventud.

— ¡Willow Park!.

Boscha grito molesta, de inmediato la alfa apareció tras ella, algo agitada y con el cabello alborotado.

— ¿¡Qué pasa!?.

— ¡Pasa esto! Te matare si el maquillaje no los cubre — Boscha señalo hacía su cuello, las marcas de dientes y los chupetones eran incontables, uno tras otro.

— Perdón es qué no me podía controlar — Willow le mostro un puchero, aún que por dentro sonreía orgullosa y victoriosa de ver cada una de las marcas.

— Tienes suerte de ser tan linda alfa tonta — la pelimagenta se levanto, rodeando con sus brazos el cuello de la azabache.

Le gustaba ser más alta, de esa forma podía robarle los besos qué quisiera.