Prometo curar tu dolor . . . (A Friday Night Funkin' x Vocaloid Fanfiction)

Capitulo 3 - Las mentiras tarde o temprano, siempre salen a la luz

"¿Qué haces aqui?" Pregunta Meiko, viendo a Neru a lado de ella.

"Solo quise venir a ver como esta mi amiga, ¿Acaso no puedo?" Pregunto Neru alzando una ceja.

"¿No estas con los demás?" Pregunto Meiko.

"Nah, solo me juntaba con ellos porque Miku estaba ahi y que tuve un flechazo pasado por Len, pero viendo como Miku se esta alejando de estos, no planeo acercarme yo misma, algo debe haber pasado para que eso ocurra y no quiero estar en el fuego cruzado." Dice Neru estirándose.

"Ya veo, eso es un alivio." Murmura Meiko, confundiendo a Neru.

"¿Por qué sería un alivio?" Pregunta Neru curiosa.

"No, por nada." Dice Meiko, restándole importancia al asunto.

Ambas mujeres se detuvieron delante de una puerta de uno de los cubículos en los que durmieron, en el cual estaba durmiendo la peliceleste favorita de ambas. Meiko saca la tarjeta de acceso extra que Miku siempre le da por si se le pierde o se le queda dentro del cubículo, y la ingresa, desbloqueando el seguro que tenia la puerta.

Al abrir la puerta, las dos se sintieron instantáneamente confundidas por la vista que tenían ante ellas.

Keith estaba acostado en la cama roncando silenciosamente, se lo veía increíblemente feliz y en paz, con sus brazos alrededor de la pequeña peliceleste Miku. Estos tenían las piernas enredadas y las mantas tiradas al azar a su alrededor.

"Vaya, ya decía yo que estaban muy juntos para solo ser sensei y pupilo o solo amigos." Dice Neru con una sonrisa zorruna en su rostro. Meiko solo la miro de reojo y suspiro.

Marchando hacia la pareja durmiente, Meiko los miró directamente desde arriba. El rostro de Miku estaba enterrado en el pecho de Keith y sus manos se juntaron frente a ella agarrando la camisa de Keith ligeramente. Unas pocas marcas de lágrimas en la camisa y el rostro de la Hatsune indicaban que había llorado mientras dormía. Pero la sonrisa suave y tierna en su rostro mostró que se estaba divirtiendo.

*Golpecito* ". . . chan~" *Golpecito*

*Golpecito* ". . . ku-chan~" *Golpecito*

*Golpecito* ". . . Miku-chan~" *Golpecito*

Miku fue despertada por el repentino golpeteo en su sien. Sus ojos azul zafiro se abrieron de golpe. Estaba mirando la camiseta de Keith, ella sintió su aliento en la parte superior de su cabeza, sus brazos alrededor de ella y sus piernas se enredaron. Ella disparó sus ojos hacia el techo, solo para ver a su figura de madre, con una media sonrisa, claramente divertida por lo que ella estaba viendo.

La verguenza se apoderó de ella mientras intentaba separarse de los brazos de Keith, ella no quería irse, y al parecer él tampoco quería dejarla ir. Un grito ahogado escapó de ella cuando Keith la abrazó más fuerte, colocando su cabeza debajo de su barbilla.

"Veo que Keith-san es un abrazador." Meiko dijo sonriendo mientras hacía un movimiento para ayudar a la pobre chica atrapada a salir. Quitando con cuidado los brazos de Keith de la cintura de Miku, la Sakine obtuvo una abertura suficientemente grande para que Miku pudiera salir. Meiko y Neru miraron con una mirada perpleja en su rostro mientras Miku intentaba ponerse rápidamente ropa de salida encima de su ropa de dormir.

"Ya mismo voy, dejen que me vista y despierte a Keith-kun para ir juntos." Dijo Miku con su voz normalmente áspera. En otra situación, normalmente su voz podría haberles intimidado, pero su cara enrojecida hizo que cualquier táctica de intimidación fracasara de manera casi certificada.