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Advertencia contenido incest0s0, por favor abandonar la historia si eres sensible

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Advertencia contenido incest0s0, por favor abandonar la historia si eres sensible.

Maisie 

La sangre, está por todos lados, Maisie la siente incluso fluyendo dentro de ella. Es cierto, aunque no tenga nada que ver con su menstruación, sigue allí, palpita dentro de ella. Bañándose bajo un cálido baño de sangre tibia, se sumerge y surge para tomar un respiro. Y sabe que es tiempo de huir, correr, sal de esa bañera, vienen, vienen con armas, porque están cabreados, y van a disparar.

Intenta correr, los tacones no ayudan, se tropieza por que el suelo esta resbaloso con la sangre que la persigue, tiene vida, va a jodidamente alcanzarla cuando cae al suelo... Parpadeando mientras se recompone, de repente está en cama, rodeada de sabanas húmedas, ella está sudando frio mientras se burla de sí misma.

—Otra estúpida pesadilla.

Frotándose la frente sudorosa, ella se levanta de cama, la sonrisa trastornada la acompaña, dándose cuenta de que tiene el jodido periodo irregular. Genial, justo a tiempo para joderle el día.

Se supondría que hoy llegaría el regalo de cumpleaños, aunque no estaba emocionada, cuando entiendes que puedes recibir regalos todos los días del año, el cumpleaños deja de ser especial con el tiempo.

Después de haber terminado sus estudios, ella decidió que no quería ir a la universidad, no porque odiara la idea de estudiar, ni la idea de salir a fiestas más a menudo. Simplemente sentía que ese no era su lugar, era tan ruidoso, aburrido y las drogas recreativas joderían su cabeza si las consumía a menudo. Cosa que ella detestaba de los estúpidos gorilas de la preparatoria, ¿la universidad? ¿Un nido de hormonales bestias cachondas al acecho? No, gracias, quizá cuando obtenga provecho por dejarse joder.

Burlándose de pensar como su madre, Maisie abrió sus cortinas.

Se imaginó un futuro donde heredaría todo lo que tuviera su padre, quizá se casaría con alguien importante, tendría amantes, como cualquiera en la alta aristocracia, y entonces tendría una vida resuelta y plena.

Pero entonces su padre la convenció de conseguir un título en derecho, ni siquiera tendría que esforzarse por ganárselo. Simplemente hacerlo.

Jodidos universitarios...

Toma lo que tu padre y madre tiene para ofrecer, no puede ser malo si son cosas brillantes, si valen diamantes, no puede ser malo si lo que te espera es una polla vieja y casas lujosas.

Bebía vino en el desayuno, lo aprendió de su madre, Clarisse amaba estar ebria antes del almuerzo. Solía quejarse de los problemas de sus amigas y lo cansada que estaba de oírlas lamentarse por sus trágicas vidas.

—Madre, no dudo que sus vidas sean difíciles —se burló sarcástica—, la mayoría de ellas solo llora resignada mientras su marido se enreda con sus secretarias.

Strange KillersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora