El celo

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—¿A que te refieres con que Bunnicula ha estado raro? —Cuestionó Chester hacía Harold. Debido a que él había tenido que ir al veterinario durante dos días por una pequeña infección en su estomago, no estuvo en la casa, por lo que el hecho de que Harold viniese rapido a contarle sobre el conejo y su repentino cambio de actitud, era preocupante.

—Si, muy raro.

—¿Pero a que te refieres con exactitud?

—Bueno, desde que comió una fresa, dijo que comenzo a sentir calor, y despues fue corriendo por tu cama para empezar a frotarse y dormir en ella —explico al empezar a recordar—, luego se la llevo al sotano, y no ha salido desde entonces más que para comer unas zanahorias y preguntar por ti.

—¿Dices que se comenzo a sentir acalorado? —Tartamudeo un poco al preguntar, erizando su cola al solo pensar en el posible motivo real de su comportamiento—. Harold, ¡Esa fruta debio haberlo hecho entrar en celo! —Contó alarmado, más que nada por su pellejo.

—Oh, eso explica muchas cosas —concordó el perro, sin darle real importancia al asunto—. Entonces es solo que consiga una novia —soluciono feliz, poniendo mas atención en su juguete.

—Oh amigo, no sabes lo que dices. ¿Sabes cuanto dura el celo de un conejo? Obvio no sabes —, soltó un suspiro, se había enterado por allí, que desde que un conejo macho entraba en celo, lo estaría constantemente, y mucho mas estimulado cuando la hembra volviese a entrar en esa epoca, lo normal era, entre a 18 y 20 días cada celo. De verdad que eran consideraros una especie muy poco saciable.

—¿Por que estas tan alarmado Chester? Es muy normal para nosotros estas epocas —. Harold no entendía la situación de ambos, sabía que el gato y el conejo se llevaban cada vez mejor, ya no se molestaban mucho, y si se hacían bromas eran tan ligeras que ya no las consideraba tan divertidas. Y pues claro, el perro era tan ajeno a la verdadera situación que se había formado entre las dos criaturas de diferente especie, siendo solo un secreto entre ellos dos.

—Olvidalo Harold, sigo cansado por los medicamentos —, se excuso. Miro por la ventana, ya casi era el ocaso, tenia tiempo para salir corriendo y no regresar por un buen tiempo, y eso se dispuso hacer, empacar lo mas necesario para sobrevivir un tiempo sin Mina.

Chester ya tenia todo un plan en su cabeza, dispuesto a cambiarse de indentidad si era necesario, deteniendose en seco al escuchar a Harold saludar a Bunnicula desde una de las entradas de la sala y diciendole al conejo vampiro donde exactamente se encontraba él. Gruño maldiciendo a su amigo perruno, partiendo escaleras arriba a encerrarse en el cuarto de su amada dueña, cosa que obvio no logro por que Bunnicula fue mas rapido, tapando su paso a medio camino en las escaleras, sonriendo de par en par. En sus ojos se notaba el libido por sobre encima de su postura "tranquila".

Hola, Chester —pronuncio, saludando tranquilo al felino.

—¡Ey, Bunnicula! —Saludo con nerviosismo palpable, esquivando su mirada. Si hacía contacto visual, estaba perdido.

No espero, que de pronto, el conejo le tomase del mentón con firmeza, obligandolo a verlo, cosa que quiso evitar desde el principio.

—Estás un poco extraño, tal vez estás cansando, y debes dormir un poco más —ofreció. Chester se soltó como pudo del agarre, disolviendo el ambiente entre ambos. El conejo no dijo ni hizo nada al respecto, cosa que preocupo demasiado al gato. Un Bunnicula tranquilo, jamás podría ser buena señal—. ¿Sabes? Yo si estoy cansado, iré a dormir ahora mismo, nos vemos.

El felino trato de huir, con éxito, logro correr hacia la habitación más cercana, la cuál era una para huéspedes, cuarto que casi nunca usaban pero la tenían de emergencia para alguna visita imprevista. Cerró la puerta con seguro, sintiéndose tonto al saber que el conejo fácil podía convertirse en humo vampirezco e entrar a la habitación, más se obligo a sentirse seguro, escondiéndose entre las sábanas de la cama, orando para que el conejo se calmara de pronto y no lo molestará por esa, y ninguna noche.

Bunniester OneShot'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora