One Shots - Assassination classroom

23 « Para bien o para mal, siempre te amaré »

Autor: Tercera_rueda_sama
Resumen: Karma y Asano toman como rehenes y son torturados en habitaciones separadas durante dos días, antes de que Karma haga una oferta interesante y tentadora a su captor.
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"¡Karma!"

Karma se dio la vuelta rápidamente, justo a tiempo para ver a Gakushuu siendo noqueado por un hombre corpulento con la culata de su arma, y ​​cuando el rubio rojizo se hundió en el suelo, Karma vio rojo. Dejó escapar un rugido mientras tiraba de su espalda al tipo que intentaba derribarlo, agarrándolo por la cara y golpeándolo contra una pared, escuchando un satisfactorio sonido de crujido. Cargó hacia adelante, inflexible para recuperar a su  prometida  de estos imbéciles. (Bueno, pronto será prometido, no era como si Gakushuu tuviera la oportunidad de responder antes de que fueran emboscados, pero estaba seguro de que habría dicho que sí). él al suelo. Gruñó mientras forcejeaba, antes de sentir que una botella le golpeaba la cabeza y lo dejaba inconsciente. 

"¿Estás seguro de que uno de ellos era un asesino? ¡Ambos eran casi demasiado fáciles de capturar!" Comentó uno mientras se bajaba del pelirrojo.

"¡Sé agradecido! Vamos, llevémoslos a la camioneta". Dijo el hombre corpulento mientras levantaba el cuerpo inerte de Gakushuu y se dirigía a la camioneta estacionada a un lado. Cerró las puertas traseras en las que habían puesto a los dos asesinos, agradecido de que la misión fuera fácil. Tal vez ahora... podría volver a ver a su hija. Sacó su billetera antes de sentarse en el asiento del pasajero, una foto de una linda niña con coletas marrones, pecas salpicadas en su rostro como estrellas y una gran sonrisa adornando su hermoso rostro. Trazó su pulgar sobre su rostro antes de volver a guardar su billetera en su bolsillo,  iba  a ver a su princesa de nuevo.

Cuando Karma se despertó sobresaltado, sus ojos tardaron un tiempo en adaptarse a la luz brillante sobre él, antes de que sus ojos se posaran en la figura solitaria en la habitación. No pudo evitar sonreír cuando reconoció la figura, los malos recuerdos amenazaban con resurgir.

"Yanagisawa, bastardo, ¿no te estás haciendo demasiado viejo para esto?" preguntó Karma, tratando de mantener su voz ligera a pesar de que la bilis amenazaba con salir de su garganta.

"Supongo que sí, pero te sugiero que me hables mucho mejor en el futuro, si quieres que tu novio la pase bien aquí". Sonrió con esa espeluznante sonrisa suya que nunca dejaba de enviar escalofríos por su espalda. "¿O es tu prometido? Estoy seguro de que mis hombres informaron haberte visto proponerte matrimonio, ¡qué encantador! Aunque podríamos haberlo interrumpido, ¡ups!"

Karma entrecerró los ojos y frunció el ceño, "Sabía que debería haberte matado, especialmente cuando Nagisa no lo hizo".

El hombre solo se rió, haciendo que el ceño fruncido de Karma se profundizara, "Entonces ambos son tan tontos como lo fue su querido Korosensei".

"¿Exactamente, que es lo que quieres?" preguntó Karma, decidido a ir directo al grano.

"Quiero que Korosensei salga de su escondite para salvar a su estudiante favorito, eso es todo".

Karma resopló divertido, haciendo que la sonrisa de Yanagisawa vacilara un poco. "Lo siento, pero si querías a su alumno favorito, entonces deberías haber secuestrado a Nagisa, o incluso a Kayano. Y Korosensei desapareció hace años, ¿qué te hace pensar que aparecería solo para mí?"

"Solo una corazonada, ah, ¡creo que es hora de torturar!" Yanagisawa sonrió mientras miraba su reloj con una emoción apenas velada.

Karma sonrió, "Dame lo peor".

Ahora fue el turno de reír de Yanagisawa, lo que hizo que Karma entrecerrara los ojos con precaución y confusión. "Oh, niño ingenuo, no para ti, para  él".