IV

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                                                                                                                                                   Octubre 12

                                                                                                                     Hospital psiquiátrico Lunesca

-Señorita Yildiz en algún momento de nuestras secciones a llegado a mentirme? –

-No, dile que no Yam- escuche hablar a Yem luego de muchas semanas

-sinceramente no, no me gustan las mentiras y si no me gustan no veo el porqué de hacerlo

-Muy bien conejita- dijo Yem por última vez

Al salir del consultorio Alain y Murat me esperaban para ir a idioma, sin embargo cuando llegamos todos estaban en silencio mirándonos con temor, al inspeccionar el salón pudimos observar una escena muy trágica, era Evans Miller que tenía a la profesora Ehia Bardot sujetando su cuello, mientras Ehia zapateaba Evans más la torturaba y fue así cómo éste acabó con la vida de dicha profesora, claramente este suceso fue un estruendo para todos en él psiquiátrico.

Con él paso del tiempo los chicos y yo nos hicimos inseparables, ya que realizábamos absolutamente todo juntos y para lo que no podíamos estar juntos nos esperábamos hasta poder estarlo, todo fluía muy bien e incluso nos poníamos en contacto con Evans ya que estábamos haciendo plan para escaparnos de Lunesca e irnos a nuestra ciudad de origen, pensamos mil veces que hacer con nuestra vidas y llegamos a la conclusión de vengar a quienes fueron víctimas de violencia y nunca obtuvieron justicia.

-Señorita Yildiz, cómo se siente el día de hoy?- preguntó Aston

- La verdad estoy muy bien.

-Eh mirado que tiene amigos, les llaman los mosqueteros de la muerte- reí por tal apodo

- La verdad no tenía ni idea de este apodo, suena muy chistoso- Asthon sonrió dándome la razón

- Señorita Yildiz, cómo se sintió con el desafortunado suceso de la profesora Ehia? – cuestionó Medina

-Sinceramente es una pena lo que le sucedió y no me lo tomé a mal pero todos hemos nacido para morir, de distintas maneras pero morir. – Medina nuevamente me dio la razón y me dejó ir, en el mes de agosto todos los internos recibimos doble sección debido a lo ocurrido con Bardot

Hoy era el día, los sábados no hay tanto personal en Lunesca y por esa razón los internos realizaban fiestas clandestinas por las noches es por ello que teníamos planeado ya huir, nuestro plan era completamente simple y empezamos con nuestra travesía

Mientras los demás internos estaban en la fiesta Murat fue donde un guardia a avisar sobre esta, debido a la acción los vigilantes corrieron a buscar el lugar de la actividad con el fin de traer a todos los hospitalizados, pero nos detuvo un problema, ese lio era Evans que por una extraña razón andaba merodeando por los pasillos sin embargo nos salvó ya que nos enteramos que dos de los guardias seguían en el hospital, uno de ellos atrapó a Miller y se lo llevó a su recinto pero el otro se quedó entonces me dirigí a la bodega donde se almacenaban los medicamentos, busque Magnesia Rey y dos vasos con agua entonces fui donde el guardia que quedaba y le entregue la mezcla transparente mientras bebía de mi agua con el fin de darle cierta seguridad y lo logré puesto que el hombre de un solo sorbido se bebió todo el agua en el vaso plástico, esperaba que la Magnesia durara unos diez minutos en dar efecto sin embargo el laxante fue instantáneo y no tardo ni cinco minutos en dar efecto provocando que el sujeto se dirigiera al baño, esperamos aproximadamente quince minutos y el susodicho nunca apareció entonces fue ahí donde decidimos escapar, por alguna desconocida razón Alain tenia cohetes de pólvora ocultos en su habitación estos nos ayudaron con la fuga puesto que el mismo les prendió fuego ocasionando que estos volaran en línea recta y derribara la puerta principal.

Tragedia YildezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora