Tiene un corazón tan limpio y lindo,
ya no se preocupa si la quieren,
ella se quiere sólita.
Asumió con valentía eso del amor propio.
Canta con las aves en el parque y corre, pero no persigue a nadie.
Ya no toca puertas que no abren,
dejó de insistir en donde no la buscan y ya no le duele.
Se viste y sonríe para sí misma, y lo disfruta el mundo entero.
Claro que le costó y mucho, pero mírala,
jamás se había visto tan bonita como hoy que se aprendió a amar.
- Víctor Hernández
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Con El Alma - Poemario
PoetryDías de sol alumbrando directo a mi rostro. El amor se siente, pero también se puede leer. Un cachito de felicidad también se puede hallar en los ojos que no se borran de la mente. Porque hay veces en las que el amor se disfraza de poesía y un poema...
