૮ 𝐥𝐢𝐭𝐭𝐥𝐞 𝐜𝐚𝐫𝐞 ─ 𝐦𝐬 ა

Capítulo tres.

— Osito —Señaló Jinni al peluche que estaba junto a Jisung, el omega le pasó el peluche y la pequeña sonrió — Gracias Ji.

— De nada linda —Dijo el omega.

Estaba jugando con la pequeña niña mientras que Minho había subido a su oficina a una breve junta que había tenido de última hora.

El omega había tenido varios trabajo como niñero a lo largo de cuatro años, desde que a sus diecinueve años empezó gracias a uno de sus mejores amigos.

Gracias a sus buenas referencias, el omega pudo llegar con las familias de categoría, de esas que nunca están en casa y pagan lo que sea para que cuiden a sus hijos, Jisung ha tenido que fingir que no le molestaba.

Quizás su último trabajo, con su última familia no había sido el mejor, por eso es que preferiría empezar a olvidarlo, a borrarlo de su mente.

A diferencia de ahora, con el señor Lee se sentía en un ambiente cálido y hogareño, le sorprendió mucho el que el alfa supiera cada cosa sobre su hija, sus horarios, gustos y la manera tan acogedora en que la trataba. En las otras familias, los padres no tenían ni la más mínima idea de que les gustaba a sus hijos.

— Ji, salí al patio ¿Po-favo? —Dijo la cachorra, con su ceño fruncido al tratar de decir todas sus palabras correctamente — ¿Si?

— Oh si linda, está bien pero primero tenemos que recoger estos juguetes —Señaló Han.

— Si —Jinni asintió, poniéndose de pie con ayuda de sus manos y tomando sus peluche para depositarlos en la cesta que estaba al final de la alfombra, ella sabía lo que tenía que hacer cada que terminaba de jugar, su papi Hoo se lo había enseñado.

Jisung se sorprendio cuando ella no refunfuñó.

— Sombedito —Pidió la niña, mirando a Jisung con sus ojos bastante extendidos, después puso un puchero con sus labios — S-sombedito —Señaló el sombrerito amarillo que colgaba de una pared.

— Ah, ya te entendí cariño ¿Siempre te pones un sombrerito para salir? —Cuestionó, poniéndose de pie junto a ella para tomarla de la mano y salir al patio, ella asintió y se quedó quieta cuando el omega le puso su sombrerito.

— Sol, quema, papi Hoo dice sombedito —Jinni se quería dar a explicar que cuando salian al patio ella debía utilizar un sombrerito.

Salieron a jugar, donde estaba un columpio junto a una pequeña resbaladilla y luego de ello una piscina, del otro lado habían una arboleda de flores y una pajarera donde se veían pajaritos llegar a comer e irse.

Ella salió directo hasta donde estaban la pajarera, Jisung fue detrás de ella en todo momento pero sentía que su corazón iba a derretirse en ese mismo día.

Jinni lo detuvo un pequeño tramo antes de llegar, ella camino sólita hasta ahí, alzando su manita para saludar a los pajaritos.

— Hola ¿Como tan? —Dijo ella — Él es Ji... lindo.

— Hola, yo soy Jisung —Dijo el omega siguiendo el juego de ella — ¿Todos son tus amigos?

— Si, todos, ¿lindo? —Cuestionó mirando al omega de regreso, alzando sus manitas, el rubio sabía que la pequeña pedía ser cargada — Columpios, po-favo —Pidió y Jisung la cargo para ir hasta ahí, la pequeña cachorra se estaba frotando uno de sus ojitos.

— ¿Tienes sueño linda? —Miro su reloj —Es hora de tu siesta, vamos a la casa para dejarte dormida, si papá ya termino puedes quedarte con el mientras yo voy a buscar mis cosas para empezar a pasar tiempos juntos ¿Si? —Ella asintió, rodeo con sus brazitos el cuello de él y acurruco su cabezita en el hombro.

El omega entró nuevamente a la casa, sobando la espaldita de ella para hacer que empezará a dormir, subió las escaleras hasta su habitación, pero aún no sabía cuál era.

Camino hacia el pasillo de la izquierda, pero se regreso indeciso, hasta que una voz lo oriento.

— La habitación de ella es la segunda hacía la derecha, la primera es la mía —Informó Minho — ¿Ella te pidió que la cargaras?

— Si, se estaba frotando sus ojitos así que deduje que tenía sueño ¿Por qué? —Cuestionó Jisung en voz baja para no despertar a la cachorra.

— Ella no se deja cargar por nadie que no fuese yo —Dijo Lee, mirando fijamente a los ojos a Jisung, quien cargaba su cachorrita dormida entre sus brazos.

Jinni era muy especial, ella no dejaba que cualquiera la tocara. Minho estaba sumamente sorprendido aunque por fuera no lo demostrara.

¿Por qué su pequeña cachorra dejó cargarse por el omega que apenas había llegado?

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