Capítulo seis.

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Minho tenía gruñendo intensamente a su lobo por el omega que tenía frente a el.

— Johnny, entra a la casa, yo entraré en unos momentos. No creo tardar mucho —Dijo Lee por medio del audífono, el beta avanzo dejándolos solos a él y al omega que lo miraba con ligera esperanza.

— Minho, por favor —Pidió Ji Min con su voz suave, tratando de acercarse a él para tomarlo del brazo.

— ¿Qué es lo que quieres? —Cuestionó Lee hacía el, bajando su cabeza para quedar a su altura, el omega era de estatura baja.

— A ti... a mi bebé —Dijo él, alzando su mirada.

— Nos perdiste desde el día en que decidiste abandonarnos —Gruñó.

— Quiero enmendar las cosas. Descubrí que no puedo estar lejos de ella, de mi bebé Minho, es mi hija, mi cachorra.

— ¿Sabes cuántas veces mi hija a preguntado por su madre? Muchas veces y yo he tenido que lidiar con esto sólo. Su lazo contigo se quebró, Ji Min. Ella solo sabe lo que es un padre, no una madre por tu maldita ausencia. —Gruñó más fuerte el alfa.

— Entiendo tu punto alfa, pero dame al menos una oportunidad, sé que lo que hice estuvo mal pero volví para no irme —Chilló Ji Min, dando un paso para pegarse a Minho poniéndo sus manos en su pecho y en puntillas, el alfa automáticamente tomo sus manos para quitarlas.

Lee fruncio su ceño, su pecho no paraba de gruñir.

— ¿Y quién me dice a mí que no te volverás a ir otra vez? Por favor Ji Min, allí adentro mi hija esta durmiendo, esperando por mi y solo por mi, despertará en brazos de Han para ir-

— ¿Han? —Interrumpió Ji Min — ¿Es tu nuevo omega verdad? ¿Por eso no me quieres ya? ¡Le metiste a una madre sustituta a mi bebé! —Chilló.

— Es su niñero, Ji Min —Soltando un suspiro — Y no, no es una madre sustituta para Jinni, es alguien que cuida de mi pequeña, quien le brinda amor y cuidado.

— Quiero verla —Chilló el chico.

— Ven quizás otro día cuando este de buen humor, hoy solo quiero descansar que ya es tarde, quizás solo necesites que Jinni no te reconozca, que evidentemente no lo hará, para que te largues de nuevo de nuestras vidas y no vuelvas jamás —Gruñó el alfa, esquivando el cuerpo del omega.

— ¡Minho! ¡Lee Minho! ¡Alfa! —Llamó Ji Min yendo detrás de él, quien cerró la puerta pequeña por donde entró dejándolo afuera y a un furioso alfa caminando a pasos firmes hacía su casa.

Entró a su casa furioso, tirando de la corbata para echarla al sillón, caminando hasta la barra donde tenía una colección de vinos y licores para servir un trago rápido; arrugó su nariz, trato de relajar sus hombros, pasando una de sus manos por el cuello y masajearse.

— ¿Minho? —Dijo la voz suave de Jisung, quien bajaba por las escaleras con su pijama puesta y su teléfono en las manos.

El alfa alzó su mirada, el omega se acercó hasta él pero arrugó su nariz cuando sintió el aroma de otro omega en el alfa.

— ¿Se encuentra bien? Escuche gritos...— Dijo Han acercándose hasta él.

— Perdona, no quería levantarte —Se disculpó.

— Tranquilo, estaba todavía despierto —Dijo el, sin acercarse más a Minho porque el aroma del alfa estaba siendo opacado por otro más.

— Solo me tomaré un par de tragos más y subire a dormir —Comentó Lee, dejando el vaso de cristal, cuando se bebió de un solo trago el resto del licor.

— Y darte un baño también... —Soltó sin filtro Jisung, extendiendo sus ojos cuando reacciono a que lo dijo y no lo pensó — ¡Lo siento! Y-Yo no tengo... mejor subire a mi habitación lo siento, buenas noches.

Giro su cuerpo para subir las escaleras apenado, no sabía lo que le ocurría pero detestaba ese olor impregnado en el señor Lee. Subiendo las escaleras el alfa lo alcanzo para tomarlo de la muñeca y frenarlo, el omega giro un poco su cuerpo y bajo su mirada.

— ¿Quieres tomar unos tragos conmigo? —Pidió Minho, subiendo otro escalón para estar a la altura del omega.

El lobo de Jisung chillaba por el desagradable aroma de otro omega en el alfa.

— Lo siento Minho pero yo no tomo alcohol, buenas noches. —Contestó, soltando su agarre de la muñeca y siguió subiendo.

Aunque su lado humano hubiera aceptado estar con él, su lobo omega domino por completo sus sentidos.

Minho se quedó viendo como se metía a su habitación, así que mejor decidió irse a darse un baño. Era verdad que el aroma de Ji Min estaba en él, y eso había molestado a Jisung, lo sabía perfectamente.

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779 palabras.
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૮ 𝐥𝐢𝐭𝐭𝐥𝐞 𝐜𝐚𝐫𝐞  ─  𝐦𝐬 აDonde viven las historias. Descúbrelo ahora