૮ 𝐥𝐢𝐭𝐭𝐥𝐞 𝐜𝐚𝐫𝐞 ─ 𝐦𝐬 ა

Capítulo cuatro.

La semana de prueba paso para Jisung, siendo contratado permanentemente por el señor Lee para el cuidado de Jinni.

El omega había analizado que la pequeña niña siempre se despedía de su papi, dejándo muchos besos en su carita para después dejarlo ir; Minho se encantaba con ello.

Se había mudado a vivir ya ahí, se había instalado en el cuarto de huéspedes que resultó ser grande, muy grande casi del tamaño del cuarto de donde estaba el viviendo.

En las mañanas se despertaba temprano para darse un baño y vestirse. Amo el concepto de que Lee no le exigía portar un uniforme, podía estar con su ropa normal aunque solo tuviera alrededor de diez prendas en realidad.

Después le ayudaba a Olivia a preparar el desayuno; resultó ser una señora beta de avanzada edad que era una dulce persona que cuidaba no solo de Jinni, sino también de Minho como si fuera un hijo para ella. Johnny resultó ser su esposo, un beta con una bella personalidad que transmitía paz y también cuidaba bastante de los Lee.

— Señor, ya es tarde —Dijo Jisung, tocando a la puerta de Minho, eran las siete y media de la mañana y el alfa no había salido aún — ¡Llegara tarde!

El omega fruncio el ceño.

— ¡Minho! —Gritó un poco más fuerte.

La puerta se abrió y reveló a un alfa con cabellos alborotados, unos ojos soñolientos; no llevaba ninguna camisa cubriéndolo, solamente unos pantalones por debajo de sus caderas.

— Buenos días Han —Saludó con su voz ronca matutina.

Jisung giro su cabeza hacía otro lado y repitió:

— Señor Lee, ya es tarde. Jinni ya esta despierta desde hace rato y llegara tarde, el desayuno se lo pondré en contenedores para que se lo lleve —Dijo Han — Permiso.

— Gracias, bajare en un momento, tomaré un baño —Sonrió

Jisung asintió con la cabeza, fue directo a la habitación de Jinni para besar su frente y vestirla, para luego bajar al piso principal.

Minho cerró la puerta y pasó sus manos por el rostro, toda la noche no había podido dormir por las constantes pesadillas que invadían su mente; no sabía el echo del por qué estaban sucediendo tan constantemente, pero lo detestaba mucho.

Miro el reloj y vio que en realidad si llegaría tarde, se metió al baño para darse una rápida ducha y después vestirse; hoy tenía una presentación del nuevo modelo de aeronaves.

Mientras tanto Jisung estaba en la parte de abajo, abriendo las cortinas y preparando un breve desayuno para Jinni, quien estaba sentadita en la mesa charlando muy alegre con Johnny, quien trataba de entenderla.

— Buenos días mi pequeña —Dijo Minho, quien salio con un traje ajustado de color azul marino que se amoldaba a su cuerpo, sus cabellos estaban peinados hacía atrás y su aroma natural inundaba la habitación.

— ¡Papiiii! —Gritó muy alegre la pequeña, bajándose de su silla con ayuda de Johnny para correr hasta él.

— ¿Dormiste bien? —Cuestionó el alfa, sonriendole y besando la punta de la nariz de la pequeña; Jisung los observaba feliz mientras servía la comida.

— Si papi, bien —Dijo ella — ¿Tu?

— Bastante bien mi cielo —Mintió.

— Tu desayuno ya está servido pequeña, dale un beso a papá que va tarde al trabajo, aquí está su desayuno ya empaquetado Señor.

— Iré a encender el auto —Comentó Johnny, saliendo del lugar.

Jinni empezó a dejar besitos en el rostro de Minho.

— Te amooooo papi.

— Yo te amooooo más mi pequeña —Respondió el alfa, olisqueando su cuello para marcarla con su aroma.

Jisung tuvo que abrir y cerrar sus ojos rápidamente en el momento en que el alfa empezó a soltar feromonas.

— Ve a desayunar —Pidió Minho, dejándola nuevamente en el suelo, salió del lugar tomando su mochila sin el desayuno y Jisung fue detrás de él.

— Espérame aquí linda, papá olvido su desayuno —Dijo Jisung, Jinni se quedó junto a Olivia desayunando.

El omega salió de la casa, viendo que Minho estaba ya entrando al auto y el portón del estacionamiento estaba ya abierto.

— ¡Señor Lee! ¡Su desayuno! —Grito, el alfa se giro al verlo.

— Lo siento, no he dormido bien y voy bastante distraído. Gracias. —Se sinceró.

— Lleva ahí su café, tómelo para que tenga energía, buena suerte Señor — Dijo Jisung, sonriéndole cálidamente.

— Lo haré, muchas gracias Jisung —Agradeció Minho, tomando las cosas y subiendo al auto. El rubio se quedó ahí despidiéndolo agitando su mano mientras salian de la casa.

Minho después del acontecimiento, sin darse cuenta, iba con una absurda sonrisa en su rostro mientras iba a dirección al trabajo.

El omega Han le parecía que era bastante atento con él y con su cachorra, sin duda era el mejor niñero que pudo tener y se lo había demostrado estas dos semanas que llevaba en su casa.

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