3_Saga de Géminis 2/2

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Aquella mañana con la cual nuestra protagonista despertó con ese lindo mensaje del caballero Aries, decidió tomar un baño.

No se sentía precisamente sucia, pero necesitaba refrescarse un poco. Aquel encuentro la dejo cansada, así que su idea era ducharse y tener un día tranquilo.

Su plan iba bien, hasta después de la ducha; ella estaba en su habitación, vistiéndose tranquilamente, pero un fuerte golpe en la puerta la asusto. Al no estar lista, tuvo que cubrir sus pechos con una sabana.

—¡¿Donde has estado?!—. Grito Saga, quien había irrumpido en su habitación. Esta vez, su cabello se había tornado gris y sus ojos estaban completamente enrojecidos.

—S-señor, perdón...—. Intento calmarlo. —Fui a la segunda casa, el caballero de Tauro solicito mis servicios—. Mintió en un intento de cubrir a Mu, ya que sabia que las cosas entre él y el Santuario no estaban muy bien.

—¿Por ese maldito no estuviste en todo el día de ayer?—.

—P-pues si...fue un largo camino y luego no pude evitar dormirme...l-lo siento mucho, mi señor—. Se quedo cabizbaja un momento hasta que el tomo su brazo y la levanto de su asiento.

—Yo te necesitaba—. Mientras con una mano la tenia del brazo, con la otra rodeo su cintura atrayéndola a su cuerpo.

Ella se sonrojo por la situación, se encontraba casi desnuda y el acababa de decir que la estuvo esperando desde el día anterior, eso la emociono un poco. Aunque no estaba muy feliz de ver el lado malo de Saga.

Aun sosteniéndola contra su cuerpo, él le acaricio la mejilla. El rostro de la chica se veía algo preocupado pero a él no le importo, ya que le dio pequeños besos en la boca. —S-señor...espere—. Intentaba decir ella, que no estaba muy cómoda con la situación en este momento.

—¿Qué pasa...Saky?—. Se detuvo un momento y la miro a los ojos. —¿No me extrañaste?—. Aunque sus ojos no se veían bien, su expresión de tristeza la hizo sentir mal por un momento, el lado malvado de Saga, despues de tantos años junto a la chica, sabia perfectamente como manipularla a su favor.

—S-si...es solo que, ¿p-podríamos dejar esto para otro momento? Estoy algo cansada—. Su lenguaje corporal intentaba demostrar el disgusto que tenia, aunque al estar pegada a él era difícil.

—¿No dijiste que siempre era un gusto para ti satisfacerme?—. La tomo mas fuerte contra su cuerpo, apretándola en señal de que no la dejaría ir.

—L-lo se, pero...—. Él no la dejo terminar, volviendo a darle besos hasta que ella correspondió a uno. Fue entonces que su lengua invadió completamente la boca de la joven.

Por un momento, él noto que ella no se esforzaba tanto como normalmente lo hacia, entonces decidió separarse. —¿Qué pasa? ¿Ese toro te dejo sin ánimos?—. Le dijo en un tono de burla.

Ella sonrió un poco ya que aquel comentario le hizo gracia. —No se me permite decir nada acerca de mis otros encuentros. Ni aunque seas mi favorito de entre los demás—.

Él se sintió alagado por lo ultimo que menciono la chica, quien finalmente tomo por la nuca a Saga y lo beso. La joven había sido convencida. De cualquier forma, para ella era imposible decirle que no a él, sea o no su lado malvado quien lo este controlando.

Este caballero, tenia algo que el resto no y ese algo le encantaba. Sin mas, él la empujo a la cama que se encontraba detrás suyo. Ahí abrió sus piernas y se arrodillo.

—"¿Sera posible que el este por hacerme un oral?"—. Se pregunto mentalmente, ya que el no solía hacerlo. No porque no le gustara, sino porque a su lado bueno le daba pena, sentía que abusaba demasiado de la privacidad corporal de la chica. Si, suena extraño, pero eso pensaba él y por mas que deseara hacerlo, era muy rara la vez que sedia a ese impulso.

La esclava del Santuario - [SaintSeiyaXTu] oneshots +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora