11. Zezé

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Jisung amaba los libros.

Era tierno en muchos aspectos, pero un día se pasó de la raya con la ternura cuando hizo un escándalo de proporciones épicas al darse cuenta de que Minho no tenía ningún libro de ninguna clase. Porque "se aburría" y quién sabe cuántas cosas más que a Minho no le interesaban.

Pero oh... magia. Justo en ese momento se encontraban fuera de una tienda de libros, situada casualmente frente al Pinky Coffee. Él se quería ir alegando que tenía frío, y quería dormir, pero Jisung en varias ocasiones le hizo pucheros tiernos que hicieron a Minho morir y derretirse por dentro.

Entraron, y el olor a libros llegó a sus narices. Jisung se sintió tranquilo en ese momento.

-No puedo creer que me has traído hasta aquí-dijo el alto una vez que se encontraban dentro.

-Basta Minho, pareciera que nunca en la vida has leído un libro- así era... desde que Jisung tomó confianza comenzó a regañar a Minho en varios aspectos, que si era demasiado ruidoso, o si se movía demasiado mientras dormían, o si "Minho era bastante idiota y torpe".

-¿Qué libro quieres?- preguntó el moreno, Jisung revisaba títulos con la vista de los libros que se encontraban en la primera repisa que vio.

Un libro llamó su atención.

-Quiero este-sonrió.

-¿"Mi planta de naranja lima"? Es un nombre raro. ¿Seguro que quieres ese?- Jisung le sonrió de nuevo. -Está bien-

[...]

Minho estaba haciendo la cena mientras Jisung probablemente leía su libro. Sintió un peso recostarse en su espalda y a alguien abrazarlo por la cintura.

-Minho... quiero leerte el libro-la voz de Jisung tenía un tono infantil. Al mirarlo, Minho notó que también estaba haciendo un ligero puchero tierno. Minho sonrió, apagó la estufa mientras Jisung tomaba su mano y lo guiaba hasta el sofá de la sala. La televisión estaba encendida, pero no emitía sonido, solo alumbraba el lugar con luces tenues de diferentes colores.

Cuando Jisung comenzó a leer, Minho se sintió extasiado, y a la vez curioso, las palabras salían con sorprendente fluidez, las expresiones y los tonos eran tan correctos.

Se suponía que la gente gato no sabía leer.

Dudas y más dudas, Minho comprendió que había tanto de Jisung que él no sabía, y se sentía extraño. El moreno comenzó a cuestionar todo, el mayor nunca le hablaba de él, de su pasado, las dudas explotaban continuamente en su cabeza esperando a ser respondidas.

El mayor paró de leer. -Amo este libro, pero es muy triste...-

-Jisung...-el nombrado miró al moreno. -¿Como aprendiste a leer?-

El mayor bajó la cabeza mirando al libro, se quedó callado por un tiempo, pareciendo analizar sus palabras.

-Mi dueño anterior... tenía una biblioteca-hizo silencio unos segundos. -Yo acostumbraba estar todo el día allí-

El azabache se veía cabizbajo, al menor le carcomían las ganas de saber más, pero sabía que no era lo mejor, no quería cagarla de esa forma.

-Jisung...-el mayor lo miró -¿Puedo abrazarte?-

Sin preguntar, el azabache dejó el libro a un lado y acomodó sus rodillas a cada lado del regazo del contrario, Minho rodeó su cintura con sus brazos, pegándolo a sí mismo, mientras el contrario escondía la cabeza en su cuello. Era cálido estar abrazados, el chico gato parecía un verdadero bebé para el menor.

Minho miró sus facciones más detalladamente, se veía tan delicado, pero a la vez expresaba un aura no tan delicada.

-Jisung...- «creo que me gustas.» pensó Minho. El mayor levantó la vista al escuchar su nombre.

-¿Si?- Minho apartó la vista.

-Yo... tengo hambre-

^._.^

Todos los créditos a la autora original @KarenTommoS

Todos los créditos de la portada a @KarenTommoS

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Cat(ch) Me ᵐⁱⁿˢᵘⁿᵍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora