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Normal Valley, hogar para familias felices y normales.

Todo era tan tranquilo y armonioso, la gente vivía feliz y convivían sin ningún problema entre ellos.

Al menos así fue hasta que llegó él.

El joven maestro Jung, un joven de al menos unos 20 años, vestido de manera elegante, con sonrisa radiante, un color muy peculiar de ojos y un aura un tanto extraña.

Fue algo....raro para los adultos de aquel lugar, que alguien tan joven llegará a vivir a la vieja mansión casi al final del valle y completamente solo.

Al ser un valle pequeño, todos se conocían entre todos y los rumores no demoraron en correr.

Nunca habían visto a alguien tan extraño como el joven maestro, no sabían su nombre, ni de dónde venía, ni mucho menos que hacía tanto tiempo solo en esa casa.

A los pocos meses de la llegada de este hombre, cosas raras e inexplicables empezaron a pasar, en las casas de la localidad.

Desde cosas que desaparecían, hasta objetos que se movían solos.

Al principio se buscaba la razón más lógica, pero al ser personas tan ajenas a lo nuevo se asustaron rápido.

Creando así el rumor de que el joven maestro Jung había traído con su llegada, un sin fin de fantasmas.

Pero solo quedó en eso, un simple rumor.

Aunque eso solo hizo que la curiosidad de los niños del lugar creciera mucho más.

En especial la del joven Min Yoongi, el pobre huérfano de la localidad, a sus cortos 18 años, era conocido y querido por todos, al ser tan alegre y juguetón,siempre lo veías algo golpeado pero con una sonrisa amable, además de que era el líder de todos los niños del valle.

Pero así como era amado, era regañado, por meterse en problemas por su incontrolable curiosidad, misma que lo llevó esa noche a meterse en la mansión.

Tenía algo de miedo no iba a mentir, pero ¿Podían culparlo? Al llegar a la puerta está se abrió sola prácticamente fue una invitación, por eso estaba ahí.

Camino con mucho miedo por el largo pasillo, estaba casi todo oscuro, de no ser por la tenue luz de las velas que iluminaban los rincones.

No sabía a donde ir, hasta que vio unas escaleras.

¿Tal vez debería considerarlo?

Tomó aire en sus pulmones y con todo el cuidado del mundo, empezó a subir, no sabía que podía encontrar allá arriba y si los rumores eran ciertos, lo más probable es que terminara poseído o algo así.

Al estar arriba vio dos pasillos largos, al final de cada uno había una puerta de madera negra.

¿Derecha o izquierda?

Fue hacia la izquierda, a cada lado habían más puertas, la verdad no quería abrir ninguna así que las pasó de largo, hasta llegar a la última puerta.

Justo antes de tomar el pomo de puerta sintió un aire frío recordar su columna vertebral, casi como si alguien respirara cerca de él.

Trago duro, no quería voltear, quizás algún fantasma estaba ahí tras él, listo para chupar y devorar su alma.

Cerró los ojos y le rogó al cielo que lo ayudará, mientras ese aire frío solo se fue, siendo reemplazado por un dolor intenso en su muñeca, casi como si fueran a rompersela.

Soltó un quejido que calló de inmediato y miró su brazo, este se estaba tornando morado, entró en pánico.

No sabía qué hacer, así que tomó con fuerza el pomo de la puerta y la abrió sin ver realmente qué había adentro, cerró la puerta con seguro y pegó su frente a la madera buscando tranquilidad.

GHOSTS   -Especial de Halloween-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora