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(Mejora a mi hije uwu)

¿Debía torturarlos?, ¿o matarlos? Su mente no descansaba por culpa de sus preguntas el líder de los demonios Kibutsuji sentía la necesidad de hacerles algo, preferentemente torturarlos como el quisiera. Desde hace un tiempo aquel cuatreto de emociones y su portador no daban ninguna señal de estar con vida y por ello mando a la quinta luna superior para espiarlos para no tardar en darse cuenta de que estos tenían contacto con un humano una sonrisa apareció en sus labios palidos de solo pensar en como torturarlos, su sonrisa llego a ensancharse más al imaginar comerse a aquella chica frente a ellos pero ya sería despues.

La temporada de invierno había llegado lo que hacía empeorar la salud de ___ pues en esta epoca del año era más facil que tomara un resfriado. Pero dejando eso de lado, su preocupación aumentaba de vez en cuando al sentir que alguien la vigilaba además de que ultimamente sangraba grandes cantidades de sangre por la nariz, su piel se estaba haciendo palida y la toz se hacia más frecuente, sentía que las medicinas ya no hacían efecto y eso aumentaba su preocupación.

Por otra parte el líder del clan Nakahara se encontraba leyendo grandes cantidades de libros sobre medicina pero ninguno le ayudaba a encontrar una posibilidad de sanar a su prometida pero en la ultima pagina de un libro hayo lo que podría ser la salvación de ___ y su "padre". El lirio de araña azul se sabía que esta planta era una de las más conocidas pero más dificiles de encontrar, no había mucha información de aquella flor pero ahora sabía cual era su siguiente objetivo.

Mientras tanto con los clones, sus opciones se agotaban con el paso de los días su jefe Kibutsuji había descubierto que estos tenían contacto con un humano ademas de que la enfermedad de la femina empeoraba al igual que el "niño rico"- o como asi le llamaban ellos- cada vez más descubría que ellos estaban con su humana.

Tenían tan solo dos opciones, la primera era comerse a la femina y complacer a su lider matando el pueblo y al niño mimado, la segunda era matar al azabache junto a su pueblo y llevarse a la chica. Querían irse por la primer opción pero extrañamente sentían que no debían matarla y tan solo dejarla vivir y estar a su lado.

Dejando de lado todo aquello, podíamos apreciar como ___ bebía su te relajadamente pues hace unos momentos Ryoga había venido a hablar con ella diciendole que saldría por unos días y que tuviera cuidado y tratara de calmarse.

-. Tal vez Ryoga tenga razón. Dijo mientras daba un sorbo al liquido.

Tal vez debería dejar aquellos pensamientos negativos de lado pues puede que solo sean pesadillas que jamas ocurran, su tranquilidad se vió interrumpida al escuchar un ruido extraño de afuera con curiosidad decidió hechar un vistaso pero no sin antes abrigarse bien. Sus ojos se abrieron de más al ver un hombre tirado en la blanca nieve, este alparecer vestía un lindo yukata negro y su cabello era de un color negro y corto pero lo preocupante fue al ver su piel palida, al sentir sus manos noto que estaban más que heladas.

Decidio voltearlo para ver su rostro y ella quedo atemorizada.

-. Pero si es...-. Decía en un susurro apenas audible.

Aquel hombre era el que siempre la mataba y torturaba en sus sueños, no sabía si ayudarlo o dejarlo morir ahí. Al final su corazón la delato y ahora aquel hombre extraño estaba recostado en el futón de la peli c/c el cual respiraba entrecortadamente, ¿qué debería hacer? ¿Llamar a un doctor? Su mente era un lío pero esta paro al ver que sus ojos empezaban a abrirse y en efecto eran los mismos ojos rubís que veía en sus sueños, eran los mismos no lo dudaba, su corazón se aceleraba del miedo no sabía que hacer ¿y si me mata justo aquí? Pensaba con desesperación.

Sin embargo, su desesperación paro al ver que el hombre se levantaba y la miraba para seguido sonreírle dejandola confusa pero aún con algo de miedo.

-. Gracias por rescatarme-. Hablo, al parecer su voz era grave.

-. Sí...-. Respondió a duras penas.

-. ¿Cuál es su nombre señorita?-. Volvió a hablar a lo que ella trago saliva.

-. Suzuki... Suzuki ___-.

El azabache sonrio-aparentemente- de una manera dulce ante la idiotez de esta niña, ahora que la conocía en persona le sería más facíl reconocerla para pronto acabar con ella.

En alguna otra parte.

El azabache había llegado a un pueblo algo pequeño y mientras pasaba algunas personas lo miraban por la gran joyería que llevaba, anillos, aretes, etc. Pero un niño de cabello borgoña llamo su atención atención pero dejo pasarlo y fue directo a su objetivo, una hora despues de caminata llego y ahí se encontraba una mujer cargando a un bebé y a su lado varios niños, se acerco a ella y habló.

-. ¿Usted es Kamado Kye?

La mujer abrió sus ojos sorprendida y los niños se escondieron detrás de ella...

Me aparezco despues de un puto mes.

Me aparezco despues de un puto mes

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Yo despues de matar a Kuta:

Yo despues de matar a Kuta:

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Akai YuriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora