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No tienes que responder esto ahora, pero pregúntate ¿qué quieres?

Ryujin habitualmente golpeaba su pie contra el suelo. Se impacientó con toda esta prueba, debatiéndose consigo misma si realmente elegiría a la persona adecuada. Se cuestionó a sí misma, sin saber si estaba o no presionando contra su corazón o lo que realmente quería. Heejin dejó en claro que ahora era el momento de no cometer más errores y decisiones de las que luego podría arrepentirse. Ahora mismo necesitaba respuestas, la respuesta. No más excusas.

Durante estos tiempos que consumen la mente, necesitaba algo de alimento. Algo para ponerla de mejor humor. Sabía que no podía tomar algunas decisiones, especialmente las importantes, con el estómago vacío. Su mente repasó los momentos especiales que compartió con Yeji y Yuna. Y, sin embargo, las palabras de Heejin parecían hacer eco en su cabeza sin parar.

Si quieres una aventura, ve con Yuna, si quieres algo que dure, digo que Yeji es la indicada.

Ryujin detuvo la preparación de su comida como si fuera su propia mente la que puso en pausa. ¿Sería una cosa con Yuna realmente nada más que uno y listo? No podía ignorar la posibilidad de que pudiera haber algo más valioso con Yuna de lo que Heejin había especulado previamente. Siempre que aminorara el paso y no saltara a la lujuria y la pasión inmediatas, podría tener algo entre ellos. A Ryujin le gustaba creer que cualquier persona con la que pudiera estar tenía el potencial de durar hasta el matrimonio, pero comparado con todos los demás, eso era solo optimismo. Yuna podría ser la indicada y a la vez no.

Pero cuando piensa en Yeji, las sonrisas se dibujan en su rostro con mucha facilidad. Aunque su relación comenzó interesante  por decir lo menos, Yeji era muy encantador. Tipo. Reflexivo. Y lo mejor de todo, hizo doler a Ryujin de sonreír. Ahora ella estaba aquí. Lo arriesgó todo por una decisión tomada en el momento y ahora estaba pagando las consecuencias. Una parte de ella creía que no se merecía una segunda oportunidad con Yeji ni la oportunidad de siquiera hablar con ella por lo que había hecho. Pero algo la obligó a hablar con ella, algo le hizo creer que Yeji estaría dispuesta a escuchar a Ryujin. Fue una corazonada. Lo suficientemente bueno para que ella al menos lo intente.

¡¡Ay!!

Ryujin se estremeció y miró el corte en su dedo. Había estado demasiado concentrada en sus pensamientos como para prestar atención a la preparación de la comida. Parece que su almuerzo tendría que ser comida para llevar ya que no era una gran fan de los malditos sándwiches. Ryujin tomó su dedo herido y aplicó presión alrededor del corte con una toalla de papel limpia.

"¿Estás bien?" Heejin entró en la cocina, impulsada por el repentino estallido vocal de dolor que escuchó.

"No es nada. Solo el clásico viejo que no presto atención".

"Déjame ver."

Heejin condujo suavemente a Ryujin al sofá donde era más fácil mirar cómodamente la herida. Reveló la tela roja recién descubierta de su dedo y revisó si sangraba. Heejin aplicó la presión ella misma, lo que hizo que Ryujin se encogiera.

"¿Por qué parece que siempre estoy cuidando de ti?" Heejin dijo con sátira, su enfoque en el dedo de Ryujin.

"Porque soy una persona indecisa y horrible que no merece a alguien como tú". Ryujin respondió desesperadamente, mirándola esperando una respuesta acordada.

Con todo el drama atado y conflictivo en el que Ryujin se involucró, sintió un océano de culpa porque Heejin tuvo que presenciar todo. Una de las muchas cosas que no le gustaba hacer era decepcionar a la gente, sobre todo a su mejor amiga. Heejin probablemente pensó que era estúpida y temeraria. Esas palabras pueden aplicarse a ella, pero la aprobación de Heejin significaba algo y si no la tenía, entonces fracasó. 

𝘏𝘢𝘵𝘦 𝘠𝘶 𝘓𝘰𝘷𝘦 𝘙𝘺𝘶 〘2𝚂𝚑𝚒𝚗〙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora