-Todavía me parece increíble que tengas auto y yo no. -confiesa Levi, cruzando los brazos. Eren suelta una risita.
-Algún día tendrás un auto, Levi.
-Ese es el apoyo que necesito. - Exclama el pelinegro, riéndose solo. -Mis padres e Isabel creen que no soy lo suficientemente responsable para tener un auto... - murmura Levi, frunciendo el ceño.
-Deberías darles razones para que te consideren una persona responsable entonces.
-Supongo. -murmura Levi, observando detalladamente el masculino perfil de Eren. Cómo de sencillas serían las cosas si el chico no fuera la cosa más virginal que Levi había conocido en su vida. Debía admitir que, con el tiempo, se fue dando cuenta de que Eren era una persona muy bella. No solamente tenía un gran atributo allí abajo, sino que también tenía una linda sonrisa y unos ojos encantadores. Levi podía admitir sin temores que le gustaba... pero el chico probablemente moriría de vergüenza si se lo decía, y ni hablar de darse un beso o algo parecido.
Así que las cosas eran más complicadas de lo que se veía a simple vista.
Incluso había hablado con Armin acerca de su reciente y nuevo gusto por Jaeger, el pelirrubio siempre le decía que no perdía nada con intentar confesarse.
Al parecer sus padres tenían razón, pues Levi no era fanático de cargar con responsabilidades demasiado pesadas, y salir con Eren implica darle tiempo de acostumbrarse a la situación y hacerle entender que no debía cohibirse por cualquier cosa... y Levi no contaba con paciencia suficiente para estar en una situación en la que Eren fuese su novio y no poder tocarle o hacer con él lo que en sus fantasías se presentaba con tanta frecuencia.
A pesar de que, el comienzo de aquella amistad, las disculpas, la amabilidad; fue todo por un enfermo deseo de obtener la polla del menor, Levi estaba empezando a darse cuenta de que su plan no tenía fundamentos y, mucho menos, una razón válida de existir.
Se podría decir que estaba empezando a considerar la idea de rendirse, pero era de esas cosas en las que no quería profundizar, pues tampoco era que desease alejarse de Eren. Quizá... debería empezar a considerar la idea de que "sólo amigos" no era tan malo después de todo.
-¿Es aquí, Levi? - la voz del dueño de su maraña mental interrumpió el flujo de sus pensamientos con aquella pregunta, y Levi tuvo que mirar a su alrededor para ver en donde se encontraban, pues se había perdido del todo.
-Eh... sí. - murmuró Levi, observando el nombre del club al que Moblit les había invitado aquella noche.
Eren se dirigió hasta donde se podía observar una hilera de autos estacionados y se detuvo en el final, donde apagó el motor.
Levi estuvo a punto de salir, hasta que se percató de que el menor no se movía. Así que le miró.
-¿Te pasa algo, Eren? - preguntó Levi, acercando su mano hasta el cabello del castaño y revolviéndolo levemente.
-N-nunca había salido... a lugares como estos... - confesó Jaeger. Levi sonrió, pues ya se lo esperaba.
-No te preocupes, bebé, nosotros estaremos pendientes de ti todo el tiempo, no te pasará nada. - lo tranquilizó, acariciando su mejilla. Eren le dirigió una mirada avergonzada, con un brillo de temor.
-¿Prometes que no te irás de mi lado, Levi? -el pelinegro tembló bajo el efecto que esas palabras le provocaron en el estómago. Aunque sabía que Eren se refería a esa noche en el club, Levi no pudo evitar ponerlas en más de un contexto... y se sintió estúpido por ello.
-C-claro...
El menor sonrió ampliamente, haciendo al corazón de Levi entrar en grandes problemas. Ahora el mayor temía que Eren pudiera escuchar su insistente palpitar, pues estaba golpeteando demasiado fuerte contra su pecho.
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Falofilia - Ereri
FanfictionDonde diecisiete centímetros no son suficientes... Adaptación, todos los créditos a @thebunnyshiteu